Los perros más traviesos comparten una cualidad

No existe una regla fija para determinar qué raza es la más traviesa, pero sí se ha identificado que algunos canes son más propensos al juego, a saltarse las reglas y a desarrollar una forma de comportamiento más “payasa”. 

Por este motivo no es raro que se haya propuesto varias veces hashtags en redes sociales para apoyar y determinar qué raza es la más traviesa, y el resultado, una vez analizados los resultados, nos deja una tremenda conclusión, y tal vez una mala noticia: los perros más traviesos son los menos inteligentes. Según el ranking de inteligencia de Stanley Coren, precisamente todos los perros ganadores de la distinción de “travieso” están a la cola en inteligencia. ¿Cómo puede ser esto? 

Tal vez es fácil de comprender: un perro es más traviso cuanto menos acata las órdenes, cuanto menos utiliza su memoria para dar por sabidas las cosas, cuanto más sencillo es su comportamiento. Por eso, los perros más enérgicos, activos y juguetones, cuando no acatan las reglas con facilidad se convierten en traviesos a nuestros ojos.

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Spitz japonés

A simple vista podríamos creer que se trata de un pomerania blanco, pero no, los splitz japoneses son otra raza completamente distinta aunque comparten con los pomerania su gran energía y necesidad de actividad. En este caso se trata de un perro esquimal con varias ramificaciones en la zona noreste del planeta. La variedad japonesa es muy alegre, le apasiona jugar y socializar. Es un perro que se adapta fácilmente a cualquier entorno familiar, porque es muy extrovertido, eso mismo le convierte en un perro muy divertido, aunque también suele mostrar cierto carácter territorialista, por lo que no siempre se llevará bien con otras mascotas.

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Bloodhound

¿Quién iba a decir que los bloodhound iban a ser perros traviesos? Si tenemos en cuenta su aspecto y el tipo de movimientos que demuestra, parece un perro lento, desafectado y muy sensato. Sin embargo, sí, es un perro capaz de las más inconfesables travesuras. ¿Cómo es posible? No es activo, no es curioso, no es enérgico, ni es juguetón. Lo que es es muy obstinado. Cuando tiene una idea en la cabeza es difícil convencerle de lo contrario, así saca su personalidad más traviesa, no por la picardía sino por la obsesión.

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Cockapoo

Esta raza es el resultado del cruce de los poodle y cocker spaniel, y hereda de ambos una característica de su temperamento que es indispensable para ser un perro travieso: su gran extroversión. Los perros activos y con ganas de conocer el mundo son aquellos que manifiestan su parte más juguetona. Según varios rankings los cockapoo son una de las razas más amigables, extrovertidas y divertidas. Son la excepción que confirma la regla: son perros muy inteligentes. No figuran en el ranking de inteligencia de Stanley Coren, pero según los adiestradores se trata de un can capaz de desarrollar y demostrar gran memoria, así como cierta inventiva para solucionar problemas.

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Mudi

Seguro que te llama la atención este perro, es un pastor pero tiene un pelaje negro muy revolucionado. Procede de Hungría y es una raza muy trabajadora, versátil y voluntariosa. Sin embargo, a la hora de divertirse no dejará ninguna oportunidad para hacer travesuras y meterse en líos. El secreto de su felicidad es que no tiene miedo de nada ni de nadie, y eso le hace libre para entregarse tanto al trabajo como a sus juegos. Es un perro cazador, que derrocha energía y al que nunca le cansarás con juegos, carreras o búsquedas.

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Basenji

Esta raza procede del éste de África y probablemente la conozcas porque es famosa por no ladrar, sin embargo son capaces de producir un sonido muy característico, similar al canto tirolés. Además, te sonará también porque es una de las razas a las que se le asignan las famosas representaciones con forma de perro del antiguo Egipto, junto a podencos y galgos. Estos perros son muy juguetones, porque tienen mucha curiosidad y a la vez desprenden gran energía. Se muestran siempre alerta, activos y cariñosos.

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Galgo afgano

Si algo destaca a primera vista en los galgos afganos es la apariencia refinada y noble que tienen, con ese pelo largo y estilizado, cuando se mueven desprenden la imagen de estar flotando entre algodones. Sin embargo, cuando profundizamos en su carácter descubrimos rápidamente que son muy juguetones, les encanta derrochar alegría e incluso tienen actitudes de bufón, les gusta ser el centro de atención y mostrar sus ocurrencias. Sin embargo, esta faceta refinada a veces contrasta con sus travesuras, cuando las cosas se ponen serias son muy dignos, se muestran reservados y tratan de no recibir más indicaciones o adiestramiento del necesario, no les gustan demasiado las normas. Según el ranking de inteligencia, son el perro con menos aptitudes intelectuales de los que evaluó Stanley Coren.

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Terrier galés

Se cree que no solo es el terrier más antiguo, sino que probablemente sea la raza de perro autóctona de Reino Unido más antigua. Un gran honor que van acompañado de una gran responsabilidad, sin embargo estos perros no tienen ningún pudor en usar su coraje desbordante en lo que más les gusta: idear travesuras y llevarlas a cabo. Es un perro sociable, pero le encanta pelear con otros canes, así que no es raro verle enzarzado en un juego que se le ha ido de las manos y acaba siendo una disputa en toda regla.

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Chow Chow

No puedes cruzarte con un chow chow sin pararte a mirarlo, su apariencia de leoncito no deja a nadie indiferente, tampoco su lengua azul. Como su nombre bien indica la procedencia de este perro es china, y se cree que fueron el modelo que se utilizó para retratar en piedra a los guardianes de los templos budistas. Aunque si fueran de carne y hueso, tal vez meditar en estos palacios sería complicado, pues son perros muy juguetones. Gracias a su carácter extrovertido siempre están pendientes de qué nuevos horizontes descubrir y disfrutar. Son perfectos perros guardianes, atentos a cualquier imprevisto, desconfiados de los extraños y pendientes de las órdenes de sus humanos de referencia.

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Bulldog inglés

Estos perros empezaron a ser famosos por sus peleas en la Inglaterra de principios del siglo XIX, sin embargo es un perro dócil y amigable. Eso sí, los bulldog ingleses son canes muy obstinados, si la apariencia fuera el reflejo del carácter, no habría que mirarlo dos veces, ya se ve. Sin embargo, son mascotas muy fieles y, con una correcta educación, no presentan ningún problema. Ahora bien, si te descuidas, las travesuras llegarán seguro, porque los bulldog en general, y los ingleses en particular tienen muy claro que si algo les divierte, no van a dejarlo de hacer hasta que sea estrictamente necesario.

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