Harrison Ford

Cáncer, 13 de julio de 1942, a las 11:41, en Chicago

by hola.com
Hijo de Christopher Ford, directivo de publicidad y actor de radio a tiempo parcial, y de Dorothy Nidelman, también actriz de radio. Él y su hermano mayor, Terrence, fueron educados en base a las creencias combinadas de sus padres, su padre era católico y su madre, judía. Fue estudiante de la East Maine Township High School de Illinois desde 1956 hasta que obtuvo su diploma, cuando se marchó al Ripon College de Wisconsin. Allí estudiaría literatura inglesa y filosofía, aunque sin destacar como alumno. Al llegar al tercer año del curso, sin embargo, se apuntó a clases de arte dramático, viendo su oportunidad de mejorar sus resultados escolares. Fue entonces cuando descubrió su vocación y la comunicó a sus padres, que decidieron apoyarlo.
Como estudiante del Ripon College le correspondía un diploma al finalizar el curso, pero sus repetidas ausencias en clase le negaron ese premio, motivo por el que volvería desanimado a Illinois.
Poco después, y viendo que en Wisconsin no podría crecer como intérprete, viajó a Hollywood con la actriz Mary Marquardt, con quien se casaría tiempo después. Ya asentado en California empezó a participar en series televisivas, escapó de la muerte por poco, sufrió un accidente de tráfico, causa de la característica cicatriz de su barbilla, y eludió su llamada a participar en la Guerra de Vietnam fingiendo estar loco, que para algo era actor. Durante unos años trabajó en papeles secundarios o de escasa relevancia, cobrando lo justo para mantener a su familia, pero cuando vio que la situación se hacía insostenible renegó de todo y se hizo carpintero. Fue así como encontraría a George Lucas, pues, aunque abandonada la idea de ser actor, seguía en el sector construyendo escenarios. Por aquel entonces Lucas era aún desconocido y se ganaba la vida como realizador. Ford protagonizó su película American Graffitti, estrenada en 1973 y, gracias al éxito del film, se replanteó ser actor. Combinando su trabajo como carpintero con la interpretación en papeles de escasa repercusión llegó a las oficinas de Francis Ford Coppola, quien le ofrecería la representación de Martin Stett en La conversación, 1974. Se consagró en 1976 gracias a su interpretación de Han Solo en Star Wars y como Indiana Jones alcanzó las altas esferas del cine mundial.
Protagonizó la película Blade Runner, de Ridley Scott y, aunque en un principio tuvo un tropiezo de taquilla, terminó por erigirse como obra de culto de la ciencia ficción. Su carrera cinematográfica le ha granjeado más de cinco mil seiscientos millones de dólares, lo que lo convierte en el actor mejor pagado de la historia. En 1995 entró en la lista de los cien actores más sexys de la historia, publicada por la revista británica Empire. Tres años después, en 1998, sería elegido el hombre vivo más sexy del mundo, tenía 56 años.
En la gala de los Globos de Oro de 2002 ganó el premio Cecil B. DeMille, que hace honores a su brillante carrera cinematográfica. Fue premiado por segunda vez en 2010, de nuevo en reconocimiento por su carrera. Estos galardones tuvieron su precedente en 1994, cuando la National Association of Theatre Owners lo nombró Estrella del siglo del box-office. Seis de las películas en las que ha participado decoran las vitrinas del National Film Registry, y cinco han pasado a la historia, figurando en el top 100 del American Film Institute.
Detrás de las cámaras ha tenido sus incursiones, notables de hecho, en aviación, arqueología y concienciación medioambiental, causa con la que se siente especialmente comprometido.


Su Carta Astral

Júpiter, la fortuna mayor, como también se conoce a este planeta, elevado en su carta astral, en conjunción con el Mediocielo, es tan habitual en personas de éxito que podríamos decir que nació predeterminado para ello. Por ahí arriba andan también muchos otros astros, entre los que cabe destacar el Sol, la Luna y, por supuesto, Venus, porque es su regente natal, ya que nació con Ascendente Libra.
Doblemente lunático, por haber nacido en Luna Nueva, con el Sol y la Luna en el signo de Cáncer. Es frecuente que una persona con tan poderoso papel lunar en su carta astral alcance grandes cimas de popularidad.
Neptuno tan cerca del Ascendente también juega un papel crucial, como sucede en la mayor parte de actores o actrices de éxito, ya que este planeta es precisamente el que representa el mundo del cine.