Flores, sombreros charros y prendas acolchadas, en la tercera jornada de la Semana de la Moda Masculina de Milán

La ciudad italiana presenta estos días las colecciones de cara a la primavera-verano 2014

by hola.com
La pasarela masculina milanesa sigue su curso, y ayer mismo ya podíamos ver algunas de las propuestas que conformarán el armario de los hombres en el verano de 2014. De entre las colecciones salidas de los talleres más importantes del país vecino, destaca el viaje por las Américas de Etro, que se embarca en una trepidante ruta desde México hasta La Pampa argentina, con una llamativa puesta en escena en la que no faltaron los sombreros charros, los estampados paisley marca de la casa y las prendas ligeras, acompañadas de botas cowboy en piel bruñida.

En el otro extremo de la balanza, la nueva colección de Gucci pinta una temporada primavera-verano que se corresponde punto por punto con el vestuario masculino: la estación de las flores deja su impronta en trajes dos piezas, camisas, americanas y looks pijameros, con los colores borgoña, coral y blanco haciendo las veces de lienzo para intrincados estampados vegetales.

¿Quieres ver más? Así fueron los desfiles más destacados del día.
* Usa las teclas derecha e izquierda para navegar por las fotos en la página
La raya diplomática se convierte en el eje central de la nueva colección de Canali, que se extiende del tradicional dos piezas a la gabardina, el pantalón de sport o el pitillo. La firma apuesta por las siluetas estructuradas y propone una nueva manera de llevar el cárdigan, más ajustado de lo habitual y metido por dentro del pantalón. 
La paleta de colores: azulones, tonos cámel y carmesíes, con alguna concesión a los estampados -casi siempre en pantalones-, y piezas de outwear de entretiempo, como las cazadoras de piel o los abrigos de verano. 
Emporio Armani, la segunda línea de Giorgio Armani, no arriesga con su propuesta para el hombre del futuro: su apuesta para los próximos doce meses parte del marino, uno de los clásicos de verano de la firma italiana, alternando transparencias con acolchados, y tejidos con efecto panal de abeja. 
El blanco, beige y los colores lavados estructuran la segunda parte de la colección, donde no faltan los tejidos reflectantes, las chaquetas de piel de serpiente y las camisas-malla, que dejan el torso al descubierto. 
Desde la Pampa argentina hasta las rancheras mexicanas, la propuesta de Etro para la primavera-verano 2014 recorre el continente americano más allá de la frontera de los Estados Unidos: una puesta en escena llena de dramatismo en la que no faltaron los sombreros charros, el estampado paisley, las bandanas y las piezas de cuero. 
Blancos y mandarinas dan forma a la propuesta más arriesgada de Etro de las últimas temporadas, con especial protagonismo de complementos -fulares, corbatas, sombreros y bolsones de viaje-, y el calzado, con la bota tex-mex en piel bruñida como protagonista. 
Color, color y color en la nueva colección masculina de Fendi, que también se deja seducir por el naranja -uno de los colores que arrasará la temporada que viene en los armarios de los hombres-, el azul Klein y el mostaza. Los lisos dejan algún que otro hueco a los estampados estilo 'Pollock', con grandes manchas de pintura sobre el pecho, gotas de color y degradados. 
La colección destacada de la jornada: Gucci, que se acerca lo más posible al slim-fit con trajes de chaqueta perfectamente estructurados, y guiños a los caballeros británicos del siglo XIX. 
El estampado y las hechuras 'pijameras' dominan la segunda parte de la colección, que se recrea en los granates, corales, verdes y marfiles, con preciosos estampados florales y contrastes entre piezas en un mismo look
El naranja será el protagonista de 2014: así lo ha dictaminado Milán, que apuesta por la variación más potente de este color hasta en las colecciones más cercanas a los neutros y tonos claros, como la de Ports 1961, que incluye entre sus propuestas en crema, kaki y gris algún guiño al naranja butano. 
Lo mejor: las prendas con motivos geométricos con efecto degradado, especialmente llamativos en pantalones y americanas, los dos piezas en malva y borgoña de estilo ochentero, y el pantalón con bajo subido, por encima de los tobillos. 
Diatralmente opuesta resulta la propuesta de John Richmond: la firma se recrea en los estampados, con una colección que recuerda por momentos a la tableta gráfica de un diseñador, reproduciendo máscaras y rostros infinitmente hasta perderse en los contornos de camisas, cazadores y shorts de vestir.