Jady Mitchell ha hecho un alto en su apretada agenda y ha posado, fascinante, en La Granja. Un paréntesis ideal para hablar y tomarse un respiro en su ascendente trayectoria profesional.
Tras un año de gran actividad y de viajes, la bella modelo mexicana y su marido,Alejandro Sanz -que el pasado día 28 de septiembre lanzó al mercado su nuevo disco- han conseguido hacer realidad uno de sus más preciados sueños: establecer su hogar en Madrid. Jaydy se ha ocupado personalmente de acondicionar su nueva casa, preocupándose de lo más importante, "que se respire tranquilidad". Es una mujer joven y moderna a la que le gusta trabajar y tener su independencia "pero sin descuidar el hogar. Me gusta que en casa esté todo ordenado y limpio y me ocupo de que así sea. De hecho me relaja hacerlo yo misma cuando tengo tiempo". Con el alma al aire, la modelo se confiesa una mujer equilibrada, con unos valores establecidos, cuya mayor satisfacción es poder dormir con la conciencia tranquila. Cree firmemente en la amistad y afirma: "Me cuesta dejar entrar en mi vida a alguien que no conozco. Amigos de verdad, pocos. Conocidos, muchos". Jaydy tiene claro el orden de prioridades de su vida: el matrimonio, su familia y sus amigos y, en un plano inferior, su trabajo y sus aficiones. Posiblemente la joven ha encontrado la estabilidad necesaria junto a Alejandro Sanz, del que se confiesa muy enamorada: "Quiero a mi marido por lo que es, no por lo que representa. No he buscado casarme con una estrella, me he casado con el hombre que hay detrás de la estrella, el hombre al que quiero con el alma". Posiblemente sea este alma, tan sutil y transparente la que haya inspirado a Alejandro Sanz, en su último trabajo, que presentó hace escasos días en Madrid.