Coppola amplía sus viñedos

El cineasta ha pagado más de 34 millones de euros por 222 hectáreas en el valle californiano de Napa

La comida y el vino son dos de las grandes pasiones del cineasta, por ello no es extraño que Francis Ford Coppola lleve más de 30 años haciendo cine y alrededor de 20 produciendo buen vino en la bodega que posee en el valle californiano de Napa.

Los vinos Coppola nacen en Niebaum-Coppola, una bodega que el cineasta compró en 1974. Él eligió el valle de Napa como destino para pasar unos días de vacaciones con su familia, se enamoró del lugar y busco una finca para comprarla. Adquirió un castillo que estaba ubicado en una propiedad con viñedos, así es que para sacarles partido contrató a unos expertos y comenzó a crear sus propios vinos. Hoy vende unas 100.000 cajas al año y sus caldos figuran entre los mejores de esta región, la zona vinícola más importante de toda California.

Parece que su pasión por el vino empezó por casualidad, pero hoy destina gran parte del dinero que gana con el cine para ampliar su producción. Su última adquisición ha sido una finca de 222 hectáreas de terreno en el valle de Napa, la misma zona en la que Codorniu posee una bodega.

Aunque ha dedicado gran parte de sus ingresos a la creación de buenos caldos, éste no es el único negocio gastronómico que tiene el cineasta. Además de los viñedos, ha abierto en Brooklyn Morisi Coppola Pasta, una fábrica artesanal de pasta italiana, y es copropietario de dos restaurantes: Rubicon, un local que adquirió con los actores Robert de Niro y Robin Williams, y Café Niebaum, con el productor y realizador George Lucas.

Seguro que en la carta de vinos de estos establecimientos no faltan el Cabernet Franc o el Merlot que nacen en los viñedos del director de películas tan aplaudidas como El Padrino.