Cocina Ext.

Alimentos que cuidan nuestro corazón

Le mostramos algunos consejos ‘de oro’ para seguir una dieta cardiosaludable

Las verduras son alimentos especialmente recomendados para seguir una dieta cardiosaludable.

Es recomendable no abusar de las yemas de huevo, ya que su consumo descontrolado eleva los niveles de colesterol y perjudica el corazón.


Como reza un antiguo refrán, “la salud entra por la boca”, y es que una buena dieta es uno de los factores más influyentes a la hora de poder disfrutar de una buena calidad de vida. Por el contrario, una alimentación inadecuada, con un excesivo aporte calórico y alto contenido en ácidos grasos y en sal, puede perjudicar seriamente la salud de nuestro corazón. De ahí la importancia de seguir una dieta cardiosaludable para prevenir y tratar la mayoría de las enfermedades cardíacas. Pero, concretando un poco más... ¿qué alimentos son los más recomendables y cuáles los más desaconsejados?:

Alimentos ‘buenos’
Los alimentos beneficiosos se fundamentan en escaso contenido en ácidos grasos saturados, que tengan poca sal y que sean hipocalóricos. Las frutas, las verduras, las carnes magras, las de ave, los pescados azules, las grasas vegetales y los cereales son buenos.

Alimentos ‘malos’
Los alimentos con alto contenido en grasas saturadas de origen animal elevan el colesterol y perjudican el corazón. Son, entre otros, la yema de huevo, mantequilla, carnes de cerdo, embutidos, manteca, leche entera o quesos. Igualmente, los alimentos muy salados, las conservas o los mariscos elevan la tensión arterial. Los alimentos hipercalóricos tomados en exceso favorecen la obesidad, lo que, con el tiempo, perjudica seriamente el corazón.

Otros factores importantes
-El sobrepeso y la obesidad son factores de riesgo para padecer enfermedad cardíaca. Esta última guarda relación directa con la alimentación hipercalórica, y es lógico pensar que un corazón con sobrecarga de trabajo esté más expuesto a problemas.
-La hipertensión arterial lesiona las arterias coronarias y además representa un esfuerzo extra para el músculo cardíaco. Esta patología guarda una relación directa con la ingesta de sal en las comidas. Por el contrario, los alimentos con contenido escaso en sal son siempre beneficiosos para el corazón.
-La práctica de ejercicio físico adecuado a nuestra edad y condición previene la aparición de la enfermedad cardíaca. Por lo tanto, la vida sedentaria, tan habitual en nuestros días, es otro elemento de riesgo.
-El estrés y el tabaco, por su parte, son factores tradicionales y principales en el origen de la patología coronaria. Llevar una vida tranquila y abandonar el hábito de fumar resultan condiciones indispensables para disfrutar de un corazón sano.