En una fiesta, en el trabajo o de boda: un vestido rojo para acertar en cada plan del invierno

La ciencia confirmó en un estudio reciente lo que muchas amantes de la moda y las tendencias ya habían demostrado a golpe de look: el color rojo es uno de los más favorecedores de la paleta cromática. El estudio, llevado a cabo por la Universidad de Zurich (Suiza) y conducido por la psicóloga Anne Berthold explica las cualidades de este tono, entre las que llama la atención, la atracción y alegría que despierta. No es de extrañar que sea uno de los más presentes en el Street Style de las grandes ciudades de la moda o que muchas expertas apuesten por él a la hora de construir looks de invitada. Una de las maneras más fáciles de llevarlo es en vestidos, opciones sin grandes detalles que resuelven cualquier conjunto de día o de noche. Echando un vistazo a las últimas novedades de las firmas y teniendo en cuenta los diseños más repetidos en los armarios de modelos, estilistas y prescriptoras, recopilamos los 10 vestidos rojos por los que merece la pena apostar para alegrar el fondo de armario y dar un soplo de aire fresco a las sobrias combinaciones otoñales. En la imagen, las diseñadoras de The Attico, Giorgia Tordini y Gilda Ambrosio, con dos diseños rojo brillante de Valentino, el modista que mejor defiende esta tonalidad. 

Minivestido en clave 'retro'

La combinación vestido corto y botas altas suma cada vez más adeptas. Esta mezcla de inspiración años sesenta (sobre todo si se combina con calzado blanco, como el que luce la experta en moda Darja Barannik en la imagen), es perfecta para hacer frente a la temporada de frío sin dejar de lado el vestido. Hay tantas versiones como formas de vestir pero las que mejor acogida están teniendo cuentan con cuello redondo, mangas anchas y a veces abullonadas, y líneas amplias. 

Minivestido de inspiración boho, de Mango (35,99 euros).

Vaporoso

La influencer y modelo Luna Sobrino proporciona un aire desenfadado a este diseño vaporoso al incorporar un cinturón de tachuelas al vestido. Una manera de romper con la estética monocolor y adaptar la propuesta a un look más relajado, apto para un evento de día. Además, su acabado vaporoso te permitirá utilizarlo durante todo el año cambiando únicamente los complementos y el tipo de calzado. 

Minivestido rojo con volantes y escote barco con cuello joya, de la colección Giambattista Valli x H&M (149 euros).

Para looks polivalentes

Más allá de las propuestas de colores neutros y cuello perkins que inundan los escaparates de muchas firmas, este otoño los vestidos largos estampados también se dibujan como un hit de estilo y son, junto con los modelos camiseros, la mejor compra a la hora de construir conjuntos polivalentes. Gracias al print del diseño, no exigen muchos complementos y son fáciles de llevar tanto con zapatillas, botas o botines para el día a día como con sandalias o salones en el caso de un look de noche o de invitada. En la imagen, Jessie Bush con una creación de la firma Label Mix. 

Vestido midi estampado, de Zara (39,95 euros).

Vestido 'blazer'

Con una presencia más discreta que en temporadas anteriores, el vestido blazer sigue siendo una elección segura para acertar con un conjunto de fiesta sin caer en tópicos de estilo. La influencer Mery Turiel se decanta por un diseño en rojo, una alternativa que gustará sobre todo a esas chicas que buscan un modelo fácil de llevar y que no necesite grandes accesorios para completarse. De hecho, el vestido blazer de esta tonalidad puede lucirse con básicos de noche sencillos, como unas sandalias de tiras o unos stilettos lisos y añadir joyas discretas como toque final. 

Vestido blazer con detalles satinados, de Fleur du Mal (626,09 euros, a la venta en Net-a-Porter).

Para un evento especial

La cuenta atrás para la temporada de fiestas ha comenzado y es cuestión de tiempo ver la agenda repleta de compromisos, celebraciones y fiestas donde el código de vestuario implica conjuntos más elaborados. Sin caer en excesos y siempre siguiendo el dress code de cada ocasión, una apuesta infalible es el maxivestido rojo liso, una alternativa que tienen en cuenta muchas invitadas de boda pero que también puede tener cabida en estilismos de noche especiales. En la imagen, la top Devon Windsor con un diseño satinado de escote cruzado. 

Vestido largo con volantes con cinturón de lazo, de Uterqüe (159 euros).