Hacerte un cappuccino en el trabajo podría afectar a tu salud más de lo que imaginas

Los expertos advierten sobre las consecuencias de beber café o té en la oficina

Por Elena R. Ballano

Es uno de los momentos más esperados del día. El descanso en el que todas las compañeras cogéis vuestra taza favorita y vais a haceros un café. Una pausa matinal que sirve además de para poneros al día de los últimos cotilleos de la oficina y compartir vuestros cuidados de cuerpo de cara al verano, para evitar los vasos de plástico de las máquinas y ayudar así al medioambiente. Un ritual que cumplen cada mañana el 21% de los consumidores habituales de café en España y que, sin embargo, podría estar afectando a nuestra salud. ¿Terminaremos haciendo los descansos cappuccino en el take-away de la esquina o podemos seguir (de forma segura) con las reuniones en los pasillos del trabajo?

Usar día tras día una taza y no limpiarla adecuadamente termina convirtiendo este objeto en nuestro peor enemigo. Según un estudio realizado por Charles Gerba, profesor de microbiología ambiental en la Universidad de Arizona, el 90 % de las tazas de una oficina están cubiertas de peligrosos gérmenes. De acuerdo con sus investigaciones, estas últimas, podrían contener hasta 200 mil veces más bacterias que un retrete. Y no solo eso. Esta plaga podría empeora al usar el estropajo comunitario para limpiarlas, multiplicando así el número de bacterias en ellas. 

¿Qué solución propone?: “Si no hay lavavajillas en nuestro trabajo, las tazas debes limpiarse primero con agua caliente y jabón, y después con legía diluida en otra desinfectante. Asimismo, es recomendable lavar a diario bayetas y estropajos”, comentan los investigadores. De igual modo, otro de los remedios posibles para evitar enfermar, es llevar a casa la taza para lavarla correctamente; o en su defecto, tener en el trabajo nuestro propio estropajo para no usar el comunitario. 

Los peligros que tiene nuestra mesa

Pero las tazas no son el único elemento nocivo que tenemos en nuestro puesto de trabajo. Las botellas de plástico que reutilizamos una y otra vez también podrían suponer un problema para nuestra salud. Treadmillreviews.net analizó los recipientes de plástico de un atleta durante una semana y los resultados demostraron que estos recipientes tenían más de 900.000 mil unidades de bacterias. Datos alarmantes que nos animan a usar botellas de cristal, siempre y cuando las limpiemos de forma correcta. 

Más noticias sobre:
Últimas Noticias