Normalmente se nota su presencia allá por donde pasa, pero en esta ocasión además de decir que no pasó desapercibida podemos añadir que Paris Hilton causó sensación. La excéntrica rubia se dirigió a los exclusivos almacenes Barneys de Los Ángeles y lejos de salir de compras en modo casual, Paris decidió echar el resto en su vestuario, trasformándose en una autentica Barbie con coche incluido.
Paris llegó a Barneys conduciendo su lujoso y llamativo Bentley rosa, con tapicería, volante y llantas a tono y descendió de él como si fuera una muñeca. La heredera, que llevaba su melena rubia perfectamente peinada e iba maquillada de manera muy sutil, se enfundó un mini vestido rosa de escote en pico, que Paris combinó con un bolso a juego. Lo único que rompía esta monocromía eran sus zapatos en tono nude y sus gafas de sol blancas.
De hecho a Paris tan solo le faltaba llevar del brazo a su Ken en la vida real, su novio, el modelo español River Viiperi, gran ausente en esta jornada de ‘shopping’.
Paris siempre se ha declarado una fan incondicional de Barbie y tanta es su pasión por esta muñeca que hace tan solo unos años decidió que el famoso programa de tunning de la MTV tuneara su coche y lo convirtiera en el de una muñeca, y al juzgar por el resultado parece que Paris se hubiera mimetizado con Barbie.
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