Con el gesto serio, vestida toda de negro y con la única compañía de su abogado, Rosa Benito ha llegado a los juzgados de Torrejón de Ardoz para ratificar su divorcio de Amador Mohedano. Con esta firma la colaboradora pone fin a 35 años de matrimonio con Amador, con el que tuvo tres hijos. A su llegada, comentaba que tenía ganas de firmar el documento, unas palabras que amplió a su salida. “Me siento liberada. Terminamos un año y empezamos otro con ilusión” comentó con una media sonrisa.
“Estoy fuerte” aclaró tras finalizar el trámite. Y es que en los últimos meses, ha atravesado sin duda uno de sus peores momentos anímicos, por el que tuvo que ser ingresada y que la tuvo apartada de su trabajo en televisión. “Cada uno hacemos nuestra vida y ya hemos cerrado el año” concluyó Rosa, sin querer hablar más de su ya oficialmente exmarido. “De él ya no sé nada ni me importa” apuntó.
Con esta firma se pone fin a las especulaciones que se habían hecho sobre una posible reconciliación de la pareja, una cuestión a la que Rosa, en su reaparición, respondió con un tajante: “Ninguno queremos volver a estar juntos”. Tras su ingreso hospitalario, hablaron y se pidieron perdón mutuamente, tal y como narró la colaboradora. “Me dijo que teníamos una vida preciosa y, aunque estuviéramos separados, él va a estar siempre ahí".
Amador por su parte también habló hace semanas de la relación que ahora le une a su exmujer. “Trato de tener una relación cordial con Rosa y con mis hijos y tiempo al tiempo. Ahora por favor dejarla tranquila y, sobre todo, respeto, que necesitamos estar relajados. Hay que darle tiempo al tiempo”, dijo Amador entonces, pareciendo dejar una puerta abierta a una reconciliación que, con esta firma, queda de momento descartada.
