Lara Dibildos ha puesto rumbo esta Semana Santa a Marbella, tras desmentir los rumores que apuntaban a una posible relación entre ella y Rafi Camino, con el que mantuvo una relación hace más de veinte años. "Nos queremos mucho desde hace muchos años pero no estamos juntos" ha declarado Lara en su Twitter, negando así la posibilidad de una reconciliación entre la expareja.
Lara, quien ha querido dejar claro sus sentimientos, ha aprovechado el parón en el teatro, antes de comenzar los ensayos de su nuevo proyecto, para poder disfrutar de los días de vacaciones en la Costa del Sol. Lara viajó con su hijo pequeño, Álvaro, de cuatro años, fruto de su relación con el jinete Álvaro Muñoz Escassi, aprovechando así al máximo su tiempo libre con el pequeño.
Días después Lara recibía la visita de su madre, Laura Valenzuela. Juntas disfrutaron de un agradable paseo por Puerto Banús, cuando la lluvia dio tregua a todos los que visitantes de la Costa del Sol. Laura tiene una casa en Marbella, a donde madre e hija les gusta ir cada vez que tienen unos días de vacaciones.
Y aunque Lara tiene el corazón tranquilo, mientras espera al hombre ideal, toda su fuerza y energía la invierte en su familia, no sólo en su hijo pequeño Álvaro, también en su hijo mayor Fran, de 13 años, fruto de su matrimonio con Fran Murcia, y en su trabajo.
Hace unos días le concedían el Micrófono de Oro de Teatro 2012, que Luis del Olmo le entregará el próximo mes de mayo. Y ahora está inmersa en un nuevo proyecto teatral Testigo de Cargo, una obra basada en una novela de Agatha Christie, y otro para la gran pantalla. Para este último tendrá que viajar a Chile, donde se rodará Dulce nana, una película de terror, con la que Lara, que tendrá que cruzar el charco el próximo verano, está encantada.
