Después de haber asistido hace unos días como invitada de honor a la Gala de la Cruz Roja de Mónaco, que estuvo presidida por el príncipe Alberto y Charlene Wittstock, y haber estado también en el concierto que Julio Iglesias ofreció en el Sporting Club de Montecarlo, Carmen Cervera se encuentra pasando unos días de relax en uno de los destinos turísticos más concurridos cada verano en la Riviera francesa, Saint Tropez.
En sus aguas hemos podido verla acompañada por un grupo de amigos en una lancha, antes de embarcar en un yate, luciendo un pantalón y una blusa blanca estilo ibicenco y un sombrero fucsia con unas sandalias a juego. En todo momento, la Baronesa se mostró muy amable con los fotógrafos, a los que saludó desde la embarcación.
Cuando termine el mes de agosto, según reveló a la revista ¡HOLA!, se reunirá con su hijo, Borja, y con sus respectivos abogados, después de que se produjera un acercamiento entre ellos hace unos días, cuando hablaron con motivo del treinta cumpleaños de Borja, poco antes del nacimiento de su segundo hijo, Eric. “Vamos a reunirnos con nuestros abogados, que ya es un paso. Al menos, aunque sea con nuestros abogados, vamos a tener un encuentro. Hubiera preferido que hubiera sido sólo con mi hijo, como es normal”, dijo la Baronesa. A pesar de que su próxima cita sea en presencia de sus abogados, ella está muy contenta por esta reunión, ya que había intentado ponerse en contacto con él en varias ocasiones sin obtener respuesta: “No he sabido nada de ellos desde la Semana Santa del año pasado, que estuvieron conmigo en Marbella, después de que pusieron la primera piedra del Museo Carmen Thyssen de Málaga”. No sabemos si en su próximo reencuentro, Carmen Cervera conocerá a su nuevo nieto y volverá la paz a la familia Thyssen.
