Ana Aznar y Alejandro Agag son la viva imagen de un matrimonio feliz. La pareja y sus tres hijos, residentes en Londres, han hecho las maletas y se han ‘escapado’ a la isla italiana de Cerdeña para pasar unos días alejados del estrés de la ciudad sobre todo ahora que la hija del ex presidente del Gobierno está embarazada de su cuarto retoño.
Alejandro y Ana, que se casaron ya hace ocho años en el monasterio de El Escorial, han dejado patente durante estas vacaciones, que lejos de perder la pasión y la complicidad de sus primeros años de matrimonio, ellos la han ganado. La pareja, rodeada de sus tres niños Alejandro, de 6 años, Rodrigo, de 4, y Pelayo, de 2, no solo tuvo tiempo para jugar y nadar junto a ellos sino también para dedicarse a ellos mismos besándose y abrazándose cariñosamente en las aguas del Mediterráneo.
La hija de José María Aznar y el empresario, que gestiona empresas relacionadas con la Fórmula 1, no es la primera vez que eligen Cerdeña como destino de vacacional pues desde el 2003 acuden a su cita anual con la isla italiana. El año pasado se les sumó el ex presidente junto a su esposa, Ana Botella y en el verano de 2008 el matrimonio compartió vida social con el ex director de la escudería Renault Flavio Briatore y su esposa, la modelo Elisabetta Gregoraci, a los que acompañaron en un entretenido viaje a bordo del Force Blue, el yate que posee Briatore.
Convertidos ya en una familia numerosa, el matrimonio, que sueña con que su cuarto hijo sea una niña, está previsto que viajen a España para reunirse con la familia, primero en Ibiza con los abuelos paternos y luego en Marbella con José María Aznar y Ana Botella, quien fue la encargada de confirmar el pasado mayo que su hija estaba de nuevo embarazada.
