José Ortega Cano ejerció el pasado viernes de orgulloso y emocionado padre en el desfile benéfico en el que participó su hija, Gloria Camila. El acto, a favor de Asociación Síndrome de Down de Sevilla, estuvo organizado por la diseñadora Rocío Trastallino, que intentó, con la ayuda de algunos rostros famosos, recaudar fondos para la citada entidad.
Por segundo años consecutivo la hija del diestro y la desaparecida Rocío Jurado se enfundó el traje de faralaes y desfiló con gran soltura. "Me he fijado y he aprendido mucho de mi madre", reconocía. A sus 14 años se ha convertido en la niña de los ojos del torero, quien la define como "muy buena pero con carácter". Desde su asiento, Ortega Cano no dejó de aplaudir a Gloria Camila, que demostró maneras sobre la pasarela. Emocionado, el maestro afirmaba: "A Rocío le hubiera encantado ver a a Gloria Camila desfilar. Estoy muy orgulloso de ella".
Motivos tampoco le faltaron para aplaudir y animar a su esposa a Jaime Ostos. Mari Ángeles Grajal volvió a colaborar con esta iniciativa: lució varios vestidos de flamenca y se marcó más de un paso de baile ante la atenta mirada de su esposo. Y es que, sin duda, la causa lo merecía. Así lo debió pensar también Carmen Martínez Bordiú, que llevó con bastante gracia varios trajes de sevillana. Beatriz Trapote, novia del diestro Víctor Janeiro y el astrólogo Rappel completaron el cartel de modelos por esta buena causa.
Sin embargo, hubo dos ausencias destacadas: Andrea y Julia Janeiro, hijas de Jesulín de Ubrique, no participaron finalmente en el desfile aunque días antes se hablaba de que formarían parte de este evento solidario.
