La expectación por verles bailando en televisión era máxima y ninguno, o casi ninguno, defraudó a los telespectadores. El nuevo y renovado ¡Mira quién baila! abrió anoche sus puertas con una Pilar Rubio encantada en su papel de flamante presentadora y unos concursantes muy metidos en su papel de danzarines en competición.
Una de las más esperadas, Belén Esteban, hizo su debut sobre la pista con un pomposo y brillante vestido rosa para bailar un vals. “Yo no he hecho nunca ninguna flexión, ni he bailado tango, ni hip hop, ni nada… Por eso me resulta tan difícil”, decía antes de salir al escenario. La popular presentadora puso en práctica las duras horas de ensayo moviéndose al son de la música de My fair lady y dejándose llevar por su pareja de baile durante la canción I could have danced all night (Podría haber estado bailando toda la noche). “Aunque está difícil me gustaría ganar”, confesó al terminar su número.
Belén explicó que uno de los grandes problemas que tenía era que no sabía “cómo poner la cara mientras bailo”. Sin embargo, no dejó de sonreír en todo momento, mostrando así lo bien que se lo estaba pasando a pesar de los nervios. Belén dejó ver sus dotes interpretativas durante el baile, y aunque le salió mejor que en los ensayos, no pareció convencer del todo a los miembros del jurado. No quedó entre las finalistas, pero el público se volcó con ella aplaudiéndole y dándole ánimos. “He estado pensando en mi hija durante todo el tiempo”, confesó. Y es que Andrea está encantada no sólo con la participación de su madre en el programa, sino también con la de su tío Víctor Janeiro.
Los finalistas fueron ‘El Sevilla’, Edurne, Miguel Ángel Nadal y Carmen Lomana. Fuera se quedaron no sólo Belén Esteban, que no tuvo que volver a pisar la pista de baile, sino también Víctor, que se lanzó con un paso doble, y la pareja más guapa del programa, Juan García –que bailó una salsa- y Helen Lindes –con un chachachá-. ‘El Sevilla’, Nadal y Lomana (indignada porque Víctor Ullate le dijo que “metiera la barriga cuando bailase”) se quedaron a las puertas de la victoria. Bailaron un fox, un rock y un tango respectivamente, dos salsas y una rumba de salón.
Con un vals que mereció el 33 por ciento de los votos de la audiencia se alzó finalmente con el triunfo la ex concursante de ‘Operación Triunfo’, que donó sus primeros 10.000 euros a una residencia para personas discapacitadas de Villalba (Madrid). “Se lo dedico a mi familia, a mis amigos y a este público” declaraba Edurne al conocer la decisión del público.
La sensual maestra de ceremonias Pilar Rubio, que eligió para su estreno un vestido minifaldero de pailletes plateados, no pudo evitar emocionarse al finalizar la gala, que contó con la actuación estrella de Susan Boyle: “Ha sido muy especial, una noche llena de magia e ilusión”.
