La familia de Amador Mohedano y Rosa Benito ha despedido la semana con un desagradable imprevisto. Su hija Rosario tuvo que ser ingresada, de urgencia, hace dos días en el Hospital Príncipe de Asturias de Madrid. La sobrina de Rocío Jurado tuvo molestias durante todo el día, pero fue a última hora cuando decidió acudir, en compañía de su familia, al centro sanitario.
Al parecer, la cantante sufrió algunas hemorragias debido a la retirada del catéter que hace casi cuatro meses le pusieron tras ser operada del riñón en el Hospital General de Valencia. A principios de año, los médicos dejaron colocado, tras la intervención, un stent (o cánula) que al parecer se había movido con el tiempo.
La propia Rosario acudía a la clínica, junto a uno de sus hermanos y pocas horas después abandonaba el lugar sin querer hablar y con evidentes signos de dolor. Pero todo se complicó cuando horas más tarde tuvo que regresar al sufrir algunas hemorragias.
No obstante, los doctores ya han confirmado que la situación está bajo control. Ella se encuentra en observación, pero en planta y se espera que el lunes reciba el alta médica. En la madrugada del jueves al viernes, Rosa Benito abandonaba la clínica para volver a casa. "Ella está muy tranquilita y la están cuidando muy bien. Rosario estaba sola cuando estaba con Antonio, ahora está con más gente que nunca porque está con su familia", afirmaba.
Seguidamente, se reunió con su esposo, Amador Mohedano, que se había quedado a cargo de su nieto, Antonio, de cinco meses. Mientras tanto, Antonio Tejado, permanecía en Sevilla y ante las preguntas de los periodistas se mantuvo más serio y cabizbajo que de costumbre. Igualmente esquiva se mostró la que hasta hace poco era su suegra, quien ante la posibilidad de que él viniera este fin de semana a Madrid para recoger a su hijo decía: "No tengo ni idea. Yo sé lo que hace mi hija. Los demás, no".
