La Duquesa de Alba se ha sometido esta mañana a una operación, llevada a cabo por el neurocirujano Francisco Trujillo, mediante la cual le han implantado una válvula en el cerebro que mejorará los problemas de hidrocefalia que padece y mejorar así su calidad de vida. Sobre las ocho de la mañana doña Cayetana entró en quirófano y después un par de horas de intervención ha pasado a la sala de reanimación. Hace casi un año que los médicos le recomendaron que se hiciera esta operación. En un principio iba a ser operada en enero, pero unos cálculos en la vesícula se lo impidieron.
Pasadas las once de la mañana Cayetano Martínez de Irujo y Genoveva Casanova han salido de la Clínica Sagrado Corazón de Sevilla y han dicho que la operación ha salido según lo previsto: "Mi madre está tranquila y la operación ha ido muy bien". Por su parte, Carlos dice que el próximo miércoles y en función de los resultados de las pruebas postoperatorias que se le realicen, los médicos dirán cuándo podrá ser dada de alta.
La Duquesa ingresó ayer en la Clínica Sagrado Corazón y en los días previos sus hijos, Carlos, duque de Huéscar, Fernando, marqués de San Vicente del Barco, Alfonso, duque de Aliaga, Eugenia, duquesa de Montoro, Cayetano, conde de Salvatierra, y Jacobo, conde de Siruela, junto a su mujer, Inka Martí han estado junto a ella y hoy, todos han estado en la clínica para acompañarla durante la operación. También ha viajado a Sevilla Genoveva Casanova con sus hijos, Luis y Amina para estar junto a la familia de doña Cayetana.
La ausencia de Alfonso Díez Al igual que sucedió cuando la Duquesa de Alba fue operada de los cálculos en la vesícula, su amigo Alfonso Díez fue a visitarla al Palacio de Dueñas días antes de su ingreso. El funcionario realizó el pasado viernes un viaje relámpago a la capital hispalense para interesarse por el estado de salud de doña Cayetana, y a su regreso a Madrid no dudó en afirmar que la duquesa estaba "estupenda".
