Palma de Mallorca es uno de los grandes atractivos turísticos para quienes viajan a España. Muchos famosos se han rendido a sus espectaculares playas y a su excepcional clima. Es el caso de actores como Michael Douglas y su esposa, Catherine Zeta-Jones, o de modelos de la talla de Claudia Schiffer, que han hecho de la isla balear su destino preferido para las vacaciones. Una de las últimas mujeres que se han dejado seducir por el encanto mallorquín ha sido Ana Ivanovic.
Según informa el diario digital Última Hora, la tenista habría adquirido una nueva residencia en una de las urbanizaciones más conocidas de Palma, Son Vida. Se trata de una parcela que ronda los 6.000 metros cuadrados, dentro de la cual hay un chalé de unos 950 metros, construido en 1998, un apartamento para invitados y un proyecto para un spa. El chalé tiene dos pisos. La planta baja cuenta con un espacioso salón, cocina con zona de desayuno, dormitorio principal, con su correspondiente vestidor, y baño, mientras que en la primera planta se distribuyen cuatro dormitorios con terraza y tres baños. Según las informaciones que recoge dicha publicación, el apartamento que hay construido junto a la casa cuenta con todas las comodidades para sus huéspedes: salón, cocina, baño y dormitorio. El conjunto habría costado unos 4,5 millones de euros.
Cabe destacar que la tenista serbia, campeona de Roland Garros, pudo disfrutar este verano de unos días de vacaciones en Palma, en los que dedicó el tiempo a descansar y a entrenarse, en el Palma Racket. Pero ésta no es la única razón por la que Ana, considerada una de las más bellas deportistas del mundo, ha querido adquirir una nueva casa en este enclave mediterráneo. Cabe destacar, que este mes sorprendía a todos al anunciar que mantenía una relación con su compañero de profesión Fernando Verdasco, uno de los deportistas españoles más destacados del momento. Ésta sería una forma de que la joven pudiera estar más cerca del tenista madrileño.
Jóvenes promesas Se puede decir que es una de las parejas de moda del mundo del deporte. Ambos rebosan juventud y ya se han convertido en grandes figuras del tenis representando a sus respectivos países. Fernando ha cerrado un año lleno de éxitos, convirtiéndose en uno de los hombres clave en la victoria de España en la final de la Copa Davis. Por su parte, Ana, además de su dedicación al tenis, es Embajadora de Buena Voluntad de Unicef y en 2007 comenzó a estudiar finanzas y español.
