A falta de un mes para que sean papás por primera vez, Borja Thyssen y Blanca Cuesta continúan disfrutando de unos días de descanso en Suiza. El matrimonio se desplazó a su casa de Saint Moritz para pasar allí las fiestas navideñas y han decidido prolongar su estancia unos días más. Estos últimos días se les ha podido ver paseando por las calles, junto a sus inseparables perros, Leo y Mao, como una pareja más de enamorados.
Blanca se encuentra ya en la recta final de su embarazo y el matrimonio cuenta ya los días para dar la bievenida a su primer hijo. La pareja ya anunció que iba a ser un niño y que llevaría el nombre de su padre pero en su versión rusa, es decir, Sacha. Estos días se ha podido ver a Borja muy pendiente de su mujer y son muchos los gestos de cariño que se han dedicado. Por su parte, Blanca, que llevaba unos vaqueros con unas botas muy aptas para la nieve, seguía luciendo su delgada figura. Y es que la joven está estupenda en su octavo mes de gestación.
Frente a todas las adversidades, la pareja sigue más unida que nunca. Tras superar numerosas dificultades, Borja y Blanca contrajeron matrimonio en octubre. Por entonces, ya se sabía que la joven estaba embarazada, hecho que no les pilló por sorpresa. Ambos declararon que 'era un niño muy buscado' y se mostraron encantados con la noticia.
