Sonriente, optimista, con una cuidada imagen y comentando, "la vida continúa". Rocío Carrasco reaparecía públicamente esta mañana en Barcelona, en su primera salida a una convocatoria desde que su madre, Rocío Jurado, falleciera el pasado mes de junio.
Era la vuelta al trabajo de Rocío con motivo de la presentación de un nuevo producto de la empresa Mesoestetic, Grupo Body Esthetic Laboratories, de la que es imagen y en la que también participa activamente su novio Fidel Albiac. En esta ocasión, Fidel, su mayor apoyo en los difíciles meses, no estuvo acompañando a su novia.
Rocío está mejor, recuperándose poco a poco y cada día más fuerte. Llevaba un minivestido de lana en color rosa palo, botas en marrón. Fue parca en palabras y ni mucho menos quiso entrar en las comentarios malintencionados sobre las relaciones familiares. No quiso mencionar el testamento de su madre ni la decisión de José Ortega Cano de volver a los ruedos. Su contestación ante estas preguntas fue: "No voy a hablar de cosas porque no tengo nada que decir". Aunque escasa en palabras, no quiso dejar de mencionar su cariño al que fuera marido de su madre: "Tengo muy buena relación, él lo sabe, somos una familia". Y sobre ella, que tan mal lo ha pasado, un mensaje de esperanza: "Estoy mejor. La vida continúa"
