Van a ser sus Navidades más tristes. Y aunque el doctor Iglesias Puga no va a poder estar con ellos, su recuerdo no va a faltar estén donde estén. Ayer, después de dos días en España, la familia Iglesias se separaba y se preparaban para, sin duda, las Navidades más amargas de su vida.
Julio Iglesias y Miranda regresaban ayer a Punta Cana (República Dominicana) donde pasarán estas fiestas junto a sus hijos, Miguel Alejandro, Rodrigo y las gemelas Victoria y Cristina. Ronna Kneitt, la viuda del doctor, volvió también a Estados Unidos. Tenía pensado pasar las Navidades con su familia y su marido se iba a unir a ellos para recibir el año. Los planes han quedado truncados. Para Ronna serán unas Navidades muy duras que pasará con su familia, sus hijo Jaime, de dieciocho meses, y en su segundo mes de embarazo.
Carlos, el hermano de Julio, ha preferido no regresar en Miami y pasará estos días en su casa de Marbella junto a su mujer y sus tres hijos. Por su parte, los tres hijos mayores de Julio Iglesias están asimismo en España, en casa de su madre Isabel Preysler. Julio Jr. llegó a Madrid la madrugada del martes, en el mismo avión privado que su padre. Chábeli, en cambio, aterrizaba horas después en un vuelo regular junto a su marido, Christian Altaba y el hijo de ambos, Alejandro. El último en llegar fue Enrique que no pudo unirse antes al resto de la familia y viajó a España en cuanto le fue posible y estará en Nochebuena, como todos los años, junto a su madre y hermanos en Madrid.
