La lucha de Athina para cumplir la última voluntad de su abuelo, Aristóteles Onassis

Por hola.com

Totalmente instatlada en Brasil, aparentemente alejada de todo cuanto sucedía con la Fundación creada por su abuelo, parecía que Athina se dejaba llevar sin otras preocupaciones que las de su día a día y se había olvidado de lo que su apellido y su herencia conllevaba. No hay que olvidar que ha sido testigo desde los primeros años de su vida como su padre y los gestores de su herencia se peleaban por administrar la fortuna y que siendo una niña aseguraba que en cuanto recibiera el legado (con doce años ya era consciente de las disputas que ocasionaba) lo iba a dejar a gente más necesitada.

Pero sólo parecía que Athina estaba ‘al margen’ de todo lo que conllevaba su herencia porque en realidad se estaba preparando para demandar al consejo de Administración de la Fundación Alexander Onassis. El pasado septiembre sorprendía al iniciar medidas legales con la intención de presidir la fundación que gestiona la mitad de la herencia de su abuelo, el mítico armador griego Aristóteles Onassis, y para conseguirlo ha iniciado acciones legales a con la intención de presidir la Fundación Alexander Onassis, que gestiona la mitad de la fortuna del armador griego que al morir legó la mitad a su hija Cristina y la otra mitad a la Fundación que lleva el nombre de su hijo fallecido.

El diario griego Ta nea ha publicado que Athina, que sigue residiendo en Brasil con su novio, ha encargado a los prestigiosos abogados londinenses Baker & McKenzie que se hagan cargo de su demanda. La lucha se prevé dura porque para evitar la llegada de Athina el próximo 29 de enero, cuando cumpla los 21 años, los actuales gestores cambiaron a principios de verano los estatutos

El testamento de Aristóteles Onassis
En los actuales estatutos, no se hace mención a una cláusula fundamental en la lucha que acaba de iniciar Athina y que está recogida en el testamento de Aristóteles Onassis- que falleció en 1975 cuando su única nieta todavía no había nacido. "El presidente de la Fundación - dice el testamento- será un descendiente de Aristóteles Onassis siempre y cuando uno de sus descendientes esté disponible y sea elegible en razón de su edad, debiendo tener 21 años cumplidos, y la capacidad y la voluntad para servir". Athina es la única superviviente directa viva de Aristóteles y el próximo enero cumplirá los veintiún años pero cuando faltaban el pasado 1 de julio, a seis meses de que cumpliera la edad requerida, la Fundación modificó sus estatutos y cambió de presidencia.. Anthony A. Papadimitriou, hijo de Stelios A.Papdimitriou, anterior presidente, ostenta ahora el cargo máximo dentro de la Fundación. Su padre, Stelios, fue presidente de la fundación desde el fallecimiento de Cristina Onassis en 1988 hasta el pasado 1 de julio.