Chabeli, con su hijo y su esposo, vacaciones en el sur de Georgia

Por hola.com
—¿Le hablas de vez en cuando de su familia en España?
¡Claro! Y como de vez en cuando vienen a vernos, cuando él ve un avión en el cielo, siempre lo señala y dice: ’Lala’,que es como llama a mi madre. Porque cuando estamos esperando que mi madre nos visite, salgo al jardín y cuando pasa un avión le digo:’Ahí viene la abuela’. Así que ahora lo hace cada vez que ve un avión.

’No le doy tanta importancia a la moda’
—Acabas de cumplir treinta y tres años, pero al verte en fotos de años atrás, parece que no hubiera pasado el tiempo.
¿De verdad?, pregunta, sencilla y espontánea .Debe de ser algo genético; gracias a mi herencia asiática, la piel se conserva mejor...

—¿Cómo te encuentras?¿Tienes miedo del paso del tiempo?
Me encuentro en un momento de paz y tranquilidad. Y no tengo miedo al paso del tiempo. Por supuesto, todo el mundo tiene que cuidarse, más con los años, pero lo más importante es encontrarse a gusto con uno mismo.

—Te comparan mucho con tu madre. ¿Te molesta?
No, es lógico, porque es mi madre y está considerada una de las mujeres más elegantes de España. Que mi madre lo sea me llena de orgullo. Pero, te lo digo de corazón, yo no le doy tanta importancia a la moda. Soy más desenfadada. Mi estilo de vida es distinto, ya que la vida aquí es muy diferente a la de Europa, a la que llevaría en España si viviera allí. Mi madre y yo somos dos personas diferentes. Nos adoramos, pero tenemos formas diferentes de ver la vida. Yo no tengo una vida social agitada, porque ya he vivido todo eso en otra etapa de mi vida, y, hoy por hoy, elijo la vida cómoda y tranquila al más puro estilo americano.

¿Cuáles son tus prioridades?
Mi hijo y mi esposo. Mantenerme ocupada con mis pequeños negocios inmobiliarios aquí y allá. Ver crecer a mi hijo sano y feliz y disfrutar de los placeres de la vida. Con los años me he vuelto una persona muy casera, que disfruta tremendamente organizando cenas para sus amigos y cocinando para ellos.

—¿Te sientes realizada?
Sí, más que nunca, porque a esta edad vas entendiendo la vida y valoras cosas diferentes a las que valorabas cuando eras joven.

—¿Cuáles son esas cosas?
Buscar la estabilidad, ante todo, en la relación con tu pareja. Eres más paciente, sabes escuchar, eres capaz de profundizar más en tus sentimientos, aprendes a quitarle importancia a las cosas que no la tienen.

—¿Como, por ejemplo?
Las pequeñas cosas cotidianas que no son relevantes aprendes a que no interfieran en tu vida. También aprendes a dar más importancia a las cosas que lo merecen, como el cariño de los tuyos, luchar por tus metas, etcétera.

’Todo mereció la pena, con creces
—¿Y para cuándo el hermanito?
Un poco más adelante, cuando Alejandro sea un poquito mayor, pero no de momento. Estoy disfrutando mucho de esta etapa de mi vida, y me asusta un poco la idea de otro embarazo.

—¿Puede tener algo que ver con el de Alejandro? Porque debió de ser muy duro para ti.
Pues, hombre, la verdad es que claro que te asusta, si lo ves así. Pero después miro a Alejandro y todo mereció la pena, con creces.

—¿Cómo marcha tu relación con Christian Altaba?
Mi marido y yo nos queremos mucho, somos muy compatibles. Nos encantan las bromas, viajar; nos entendemos muy bien. Ya llevamos más de cuatro años juntos y estamos atravesando ese momento en el que ya nos conocemos el uno al otro del derecho y del revés. Salimos de vez en cuando a cenar fuera o a ver a mis hermanos, pero, por lo general, tenemos una vida muy clásica y tranquila.