La participación del jinete Alvaro de Miranda Neto, más conocido como Doda, en los Juegos Olímpicos de Atenas tiene un interés especial para el público griego. Doda es el novio de Athina Roussel Onassis, única descendiente directa del mítico armador griego Aristóteles Onassis. Desde que la pareja comenzara su relación apenas se ha separado y Athina ha estado junto a Doda en todos los eventos hípicos en los que él ha participado y las Olimpiadas no serán una excepción.
Athina en la tierra de sus antepasados Doda luchará por su tercera medalla olímpica en salto (obtuvo sendas medallas de bronce en los juegos de Atlanta y Sydney) en el estadio Markopulo de Atenas, la tierra de los antepasados de su novia, y bajo la atenta mirada de Athina. La pareja, sin embargo, no está pensando en boda, tal y como había asegurado recientemente una publicación italiana.
Doda se encargó de desmentir esta noticia en una entrevista concedida a la cadena de televisión griega Alpha. "Nunca hemos hablado de matrimonio -aseguró el brasileño-. Es un sueño pero no hablamos al respecto. Nos sentimos casados". Como se sabe, Athina recibió una fortuna estimada en cerca de 2.700 millones de euros en enero del pasado año, cuando cumplió la mayoría de edad. Hasta entonces, Athina había vivido protegida por su padre, Thierry Roussel pero fue cumplir los dieciocho años y trasladarse al apartamento de Doda Miranda, once años mayor que ella, de quien desde entonces apenas se ha separado.
’Todo ha pasado muy rápido en su vida’ La joven pasó a estar entonces en el centro de la atención informativa, circunstancia sobre la que Doda aclaró: "Amo a ella y a mi hija más que a nada. Al principio estaba un poco perdido sobre cómo reaccionar pero luego me acostumbré a esta nueva vida". Athina jamás ha realizado ninguna declaración desde entonces y ha sido Doda quien siempre ha manifestado su amor. "A veces -explicó el jinete- es tímida por la notoriedad. Todo ha pasado muy rápido en su vida".
