Las diferencias de edad y culturales entre ambos parecen haber sido la causa del divorcio del ex jugador de crícket y ahora político, Imran Khan, y la hija del desaparecido multimillonario inglés Sir James Goldsmith, Jemina. El año pasado la pareja había desmentido los rumores de crisis, surgidos después de que Jemina se trasladara de nuevo a Londres con los dos hijos de la pareja, Suleiman y Qassim, mientras su marido permanecía en su país. Imran, de 51 años, explicó entonces que no había nada de malo en estar separados, que los estudios de Jemina la obligaban a residir en la capital británica y que volvería a Pakistán cuando terminara. Pero lo cierto es que la crisis pareció hacerse más patente tras la ausencia de Imran en el 30 cumpleaños de su esposa.
Finalmente el líder del partido Tehreek-e-Insaf ha confirmado que se divorcian tras nueve años de unión. Ha sido una decisión de mutuo acuerdo y es verdaderamente doloroso para ambos, pero mi hogar y mi futuro están en Pakistán. Aunque Jemina ha intentado con toda su voluntad adaptarse a la vida en mi país, mi carrera política estaba dificultando aún más sus esfuerzos, explicaba Imran.
Boda polémica
Jemina e Imran se casaron en París en 1995 y posteriormente celebraron una ceremonia islámica en Lahore. La boda entre el capitán de la selección pakistaní de crícket y la heredera inglesa, muy integrada en la vida social londinense y gran amiga de la princesa Diana de Gales, causó mucha controversia. Jemina se esforzó por integrarse en la cultura musulmana de su marido e incluso se convirtió al Islam, tomando el nombre de Haiqa Khan. Nunca en mis sueños más extraños habría imaginado tanta polémica, comentó una vez Imran respecto a la elección de Jemina como esposa.
Khan se involucró cada vez más en política a partir de su retirada del críquet, en el año 1992, y se convirtió en miembro del Parlamento de Pakistán en 2002. Ha sido la voz más crítica del presidente Pervez Musharraf y aspira a ocupar su puesto algún día. Parece que las aspiraciones políticas de Imran han acentuado el choque cultural entre ambos y que este es el único motivo de la ruptura. Otros rumores apuntan, sin embargo, a que la relación entre Jemina y el actor Hugh Grant va un poco más allá de la simple amistad.