—De una manera mucho más intensa, ya que tienes sentimientos que no habías tocado antes. Siendo madre aprendes cada día, ya que tu hijo, más que enseñarle tú a él, te enseña él a ti. Evidentemente, hay momentos buenos y malos, pero todo es mucho más comprensible con una sonrisa, un abrazo, compartiendo un juego o cualquier otra cosita.
—¿Crees que deberías haber sido madre antes o lo has hecho en el momento oportuno?
—Una debe ser madre cuando le apetece y note que reúne las condiciones adecuadas para ello, aunque cuando tienes una criatura así a tu lado, hace que todos los momentos sean los idóneos. La maternidad hace el mundo más perfecto.
—¿Tenéis planes para aumentar la familia?
—Entre nosotros siempre hemos dicho que nos gustaría tener tres hijos, pero primero vayamos a por el segundo y luego ya veremos.
’Juan está entusiasmado’
—¿Qué te gustaría que fuese, niño o niña?
—Yo no creo en el tópico de la «parejita »; de hecho, me gustaría que el segundo fuese niño para que, yendo seguidos, pudieran jugar juntos. Luego ya vendrá la niña.
—¿Cómo lleva Juan ser padre?
—Está entusiasmado. Los dos estamos viviendo la misma experiencia, con la misma intensidad. Disfrutamos ejerciendo de padres.
—¿Quién dedica más tiempo al cuidado del niño?
—Más o menos al cincuenta por ciento, pero sin nada preestablecido. Todo depende de cómo surja el día; si uno está un día más cansado, se dedica el otro, pero lo cierto es que la mayoría de los días acabamos discutiendo, en broma, evidentemente, sobre quién lo va a bañar, porque a los dos nos apetece. Lo mismo que darle la comida.
—¿Cómo compatibilizas la maternidad con tu trabajo?
—Muy bien, sobre todo porque creo que es algo muy fácil porque mi profesión tiene ciertas ventajas. Es cierto que cuando estás con un programa le tienes que dedicar muchas horas, pero luego, en cambio, tienes varios días en los que no hay que ir a trabajar y dispones de las veinticuatro horas para aprovecharlas intensamente con tu hijo.
—¿Crees que tu imagen ha cambiado desde que eres madre?
—Yo creo que no, pero eso es algo que deben decir los demás. Yo me siento más sosegada, más responsable y un poco más madura. La maternidad te cambia la forma de pensar, y eso se transmite externamente.
—¿Qué aportan los niños a un hogar?
—Lo principal que aportan es amor...y mucha alegría.
—¿Qué le aconsejarías a un periodista que te llamase para decirte que se había enamorado de una de sus entrevistadas?
—Si el corazón le palpita muy, muy fuerte, que se eche para delante, pero, eso sí, si el corazón no funciona, le diría que en estos casos no hay nada que hacer.
’Me gustaría tener tres hijos’
- Tú conociste a Juan durante una entrevista que te hizo. ¿Crees que ha sido una de las mejores elecciones de tu vida?
—Por supuesto, sin lugar a duda, y la entrevista también fue una de las mejores de mi vida.
—¿Cómo le viste ese día y cómo le ves ahora?
—Evidentemente, ha pasado el tiempo y las cosas son algo distintas: nos fuimos a vivir juntos, nos casamos, tuvimos un hijo...,y evidentemente, el balance de todo es estupendo.
