David Beckham no defraudó a sus admiradores en su presentación como fichaje estrella del Real Madrid de esta temporada. A pesar del halo de megaestrella que, en principio, desprende su imagen, David Beckham se mostró tímido, halagó al club al que ha venido a jugar, comenzó su intervención con un expresivo ‘Gracias’ en castellano y la concluyó con un ‘Hala Madrid’, en alusión al himno del equipo blanco.
Beckham, que llevará la camiseta con el dorsal 23, calificó su fichaje como "un sueño hecho realidad". "A mí siempre me ha gustado el fútbol. Por supuesto, quiero a mi familia, tengo una vida maravillosa, pero el fútbol lo es todo para mí", fueron las palabras con las que el jugador llegó a los seguidores blancos. Sin embargo, Beckham tampoco decepcionó a los que esperaban ver a una megaestrella mundial con un estilo de vida que difiere mucho al de un deportista. Fiel a su personal estilo, destacó entre los trajes oscuros de los miembros de la directiva blanca. Él prefirió un traje en color azul claro, prescindió de corbata y la camisa, de color blanco, llevaba varios botones desabrochados. Su cabello iba recogido hacia atrás en dos coletas y, por supuesto, lució unos impresionantes pendientes de brillantes.
Y también fiel a su fama de hombre familiar y apoyado permanentemente en su esposa Victoria, la ex Spice girl siguió la presentación de David en el mismo pabellón Raimundo Saporta. Lógicamente, Victoria no estuvo sobre el escenario pero las primeras palabras del presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, en la presentación del jugador fueron para ella: "Querida Victoria, querido David..." comenzaba diciendo el presidente en su discurso.
