Marella y David, el nuevo matrimonio, forman una pareja muy bien avenida y compenetrada. Se conocieron hace cuatro años, mientras ambos practicaban el esquí en una estación invernal, y de aquella amistad inicial surgió el amor, que ahora les ha llevado a contraer matrimonio. «Soy muy feliz. David ha sido mi primer y único novio», nos dijo Marella, mientras celebraba su enlace rodeada de su familia y sus amigos. Y a ello añadió: «Quiero tener pronto niños». Y cuando le preguntamos qué regalo de boda le había hecho su padre, nos respondió sonriendo: «El viaje de luna de miel». Jean-Marie Rossi, que escuchó la frase de su hija, nos dijo, por su parte, igualmente con una sonrisa: «Es una vergüenza que una pareja como ellos no conozca una ciudad tan romántica como Venecia, así que tenía que hacerles este regalo».
Posteriormente, todos los invitados a la boda se reunieron con los novios en una divertida fiesta que tuvo lugar en el club privado del céntrico y exclusivo hotel Ritz, de París. Por otra parte, antes de iniciar el viaje de luna de miel, Marella y David hicieron una breve escapada a Madrid (ciudad que ella conoce muy bien, puesto que hace unos años estuvo trabajando en la capital de España haciendo prácticas de Periodismo y de Relaciones Públicas) para asistir al trofeo Lancôme de Golf, deporte que ambos practican con frecuencia.
Hace algún tiempo, cuando surgió la noticia de la relación que la pareja mantenía, Marella nos confesaba: "David es mi primer novio y espero que sea el último. Estoy muy enamorada y algún día me gustaría tener hijos con él y formar una familia". Ahora, al contraer matrimonio, han iniciado esta nueva y esperanzadora etapa de su vida.
