Después del verano, nuestro cabello puede pagar las consecuencias de una época complicada. El cloro, la sal, el sol… no son pocos los factores que pueden influir en la salud y la belleza de nuestro pelo, que necesita una cura de urgencia después de las vacaciones. Para las que no quieren invertir en tratamientos como Olaplex, hemos querido recopilar una serie de remedios caseros que pueden serte de gran utilidad en estas primeras semanas de septiembre si te has marcado este objetivo post vacacional, con la ayuda de la farmacéutica Meritxell Martí, propietaria de Farmacia Meritxell en Andorra.

“A muchos farmacéuticos no les gustan los remedios caseros sobre todo para la piel, pues no se pueden controlar las dosis de los activos o pueden estropearse más fácilmente al no llevar conservantes. Y hasta resultan más caros, ya que hemos de comprar ingredientes que muchas veces no tenemos y que no usaremos más o, lo peor, que al no controlar el efecto puede ser perjudicial para la piel. Sin embargo, cuando hablamos del cabello, sí va a ser mucho más fácil y útil recurrir a los remedios caseros”, nos detalla la experta, que nos los resume a continuación.

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'Tips' útiles

Uno de los primeros consejos que dan muchos especialistas es dar un último aclarado con agua fría para ayudar a sellar o cerrar la cutícula del cabello. Y otro de los grandes problemas del verano es que lavamos demasiado el pelo, eliminando los aceites y las proteínas del cabello. “Los tratamientos en los que aplicamos mascarillas ricas en proteínas con una fuente de calor son muy efectivos para sellar la cutícula sin engrasar, pues realmente se consigue una película en las fibras capilares”, nos cuenta. Y añade que si el cabello no está sucio no es necesario lavarlo a diario, podemos hacerlo cada dos o tres días, incluso utilizar champú seco, aunque hemos de tener en cuenta que si nuestro cabello es muy seco, va a aumentar la sequedad del mismo debido a que este tipo de champú absorbe la suciedad y la grasa del mismo.

Es importante, además, cuidar la nutrición y la hidratación de nuestro pelo. “Es por ello que es importante beber el agua suficiente para no deshidratarnos, ingerir  los nutrientes necesarios, vitaminas y minerales. De esta forma ayudamos a tratar el cabello desde dentro”, nos dice.

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Los aceites, buenos aliados

Los  aceites van a ayudar a mejorar la sequedad del cabello, el encrespamiento, el daño solar y las puntas abiertas. El rey es el aceite de coco, que además de los lípidos contiene vitaminas E y K, Zinc y Hierro. “Uno de los mejores trucos para que el aceite sea más efectivo es calentarlo o templarlo (no hervirlo)”, detalla.

Pero además del aceite de coco, se aconsejan aceites como el de semillas de macadamia o el aceite de jojoba. Son unos de los más ricos en ácidos grasos, el primero procedente de Australia y el segundo de África. Van a ayudar a recuperar el cabello más estropeado.

También se puede recurrir al aceite de zanahorias, que es muy rico en carotenos, fuente excelente de vitaminas A y, E. Sobre todo ayudará a mejorar el cuero cabelludo, y regenera el cabello y lo rejuvenece. Por último, la experta nos habla del aceite de camelia, que se extrae de las semillas de dicha flor, y es muy rico en Omega 9, que ayuda a recuperar el brillo natral del cabello y  a mantener la hidratación del mismo.

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Mascarilla con clara de huevo

Esta mascarilla va a ser una buena fuente de aporte proteico a las fibras capilares, ayudando a dejarlas más lisas y evitando el encrespamiento. Va a recubrir las fibras para dejarlas más resistentes y lisas.

Para ello, se añaden a las claras de dos huevos y dos cucharadas de aceite de coco. Hay que mezclarlo bien y añadirlo al pelo seco. Ponerlo en todo el cabello de raíces a las puntas. Dejarlo durante 20 minutos y aclarar, el último aclarado con agua fría.

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Mascarilla con aguacate

Otro de los clásicos para reparar el cabello es el aguacate. Gracias a los ácidos grasos que tiene va a ayudar a mejorar la reparación del cabello. De hecho, el aceite de aguacate se incluye en muchos productos comerciales. “Para ello, aconsejo usar el aguacate maduro, mezclarlo con aceite de jojoba o en aceite de oliva, hacer una pasta que podemos usar de mascarilla, la dejamos media hora  y aclaramos bien”, nos detalla.

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Usar cerveza

La cerveza es otro de los clásicos, pues ayuda a sellar las cutículas del cabello, dejándolo suave y brillante. Se puede usar añadiendo un poco de cerveza al champú que usemos directamente y también aclarar al final con cerveza rebajada con agua, sin aclarar al final, dejando secar. La cerveza contiene agua, lúpulo, malta, levadura y es rica en vitaminas del grupo B, B1, B2, B6, ácido fólico y biotina. Ten en cuenta, además, que puede aclarar ligeramente el cabello.

Mascarilla de yogur

Otra de las mascarillas clásicas para el cabello estropeado. Solo tienes que añadir a un yogur 2 cucharadas de aceite de oliva, pero si se desea, se puede añadir cualquier otro, además de unas gotas de aceite esencial. Ponerlo a modo de mascarilla con el cabello limpio, dejarlo durante 20 minutos con calor y aclarar. Algunas personas a esta mascarilla le añaden miel y es mucho más denso. El yogur contiene ácido láctico, lo que hará que el aceite sea mucho más efectivo, pues deja el pelo con mucho brillo.

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Mascarilla de vinagre de sidra

Tal y como nos resume Meritxell Martí, para preparar esta mascarilla necesitamos gelatina en polvo, que es una proteína y ayudará a dar cuerpo al cabello, lo hidrata y lo deja más suave y brillante.

Mezclar una cucharadita de gelatina en un vaso de agua templada, dejando hasta que se mezcle bien la gelatina, añadir una cucharada de vinagre de sidra y unas gotas del aceite esencial que nos guste. Se debe aplicar en el cabello limpio, dejar 10 minutos y aclarar.