En otoño, son muchas las personas que necesitan un extra de energía. Los días con menos horas de sol, más fríos, hacen que necesitemos en ocasiones un empujón para recuperar la vitalidad. Y, una vez más, podemos encontrar la solución en las plantas medicinales que pueden echarnos una mano en este objetivo. Así nos lo cuenta la farmacéutica Mar Sieira, que nos explica que las llamadas plantas adaptógenas contienen sustancias naturales exentas de toxicidad que aumentan la resistencia del cuerpo ante las agresiones ligadas al estrés, sin crear dependencia. "Su acción principal, por lo tanto, es ayudarnos a afrontar y a manejar el estrés y sus efectos, sobre todo en esos momentos como en los cambios de estación en los que nuestro cuerpo puede que no tenga la fuerza vital necesaria para combatirlos", afirma. Nos resume cuáles son, en su opinión, las más utilizadas.

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La maca

Tal y como nos cuenta la experta, esta planta, considerada un superalimento y que crece a 3.500 metros de altura en Los Andes, es una de las mejores alternativas. "Sus componentes hacen transportar más oxígeno al cuerpo y evitar la baja presión. Regula el funcionamiento de la glándula tiroides y es un complemento ideal para la fatiga, la pérdida de memoria, el cansancio y el estrés", nos detalla Mar Sieira.

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Hierba mate

Una opción con cafeína pero más suave que el café es la hierba mate (Ilex paraguariensis), pariente del acebo. Uruguayos y argentinos la conocen bien, pues forma parte de su cultura. No es extraños verlos con su termo en el que llevan siempre consigo esta bebida que se ha convertido en una de sus señas de identidad. De sabor amargo, se puede tomar en infusión y contiene cafeína (mateína), teobromina y teofilina, que ejercen una acción energizante sobre el sistema nervioso central.

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El ginseng (Panax ginseng)

El consumo de esta raíz incrementa la resistencia física y la capacidad de adaptación a los cambios y el estrés. Se puede tomar en decocción (una taza al día por la mañana), tintura, extracto líquido o cápsulas. Se debe evitar a partir de media tarde y en caso de taquicardias, tensión alta o insomnio.

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Guaraná

Rica en dos alcaloides de la familia de las metilxantinas –teofilina y teobromina– pero considerada libre del efecto adictivo del café o el té. "Su efecto es bastante inmediato, adecuado para personas que deban encarar tareas exigentes, como profesores, conferenciantes, opositores, estudiantes, atletas y otros deportistas en competición", nos cuenta Mar Sieira, que matiza, eso sí, que también debe evitarse en caso de hipertensión.

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Rodiola

La experta nos cuenta que también se la conoce como ginseng nórdico ayuda especialmente en estados de debilidad, desgana y apatía. "La raíz y el rizoma (el tallo subterráneo) de la rodiola se han utilizado tradicionalmente para potenciar el rendimiento físico y disminuir la fatiga, así como para ayudar a soportar condiciones ambientales adversas, como climas extremos o grandes alturas", nos detalla la farmacéutica Mar Sieira.

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