Para trabajar el yo interior desde el punto de vista de la armonía energética es importante conocer qué son los chakras y cómo nos afectan. Son los centros de energía espiritual, concretamente 7, y están repartidos a lo largo de nuestra columna vertebral, conectados con determinados órganos y glándulas.
Reciben, acumulan, transforman, distribuyen y ajustan la energía vital del organismo, que fluye por ellos a una velocidad determinada. Pero hay veces que no están en equilibrio o los tenemos bloqueados, lo que dificulta el flujo interno. Uno de los métodos más eficaces para abrir los chakras es el yoga. ¿Cómo? Repasamos 7 posturas, una por cada chakra.
Postura del árbol ('Vrksasana')
El primer chakra es la raíz, se extiende desde la espina dorsal hacia la zona genital, y está asociado al elemento tierra. Esta postura es perfecta para trabajar el equilibrio y la conciencia de estar arraigados al suelo. Es un chakra asociado a la función de las glándulas suprarrenales