¿Has ganado peso en estas semanas de confinamiento? Una etapa, sin duda, compleja que ha coincidido con el final del invierno, cuando aumenta la necesidad de comer alimentos más ricos en calorías. Pero, en esta ocasión, hay que sumar un componente extra, totalmente inesperado: los dos meses de cuarentena obligada motivada por la crisis sanitaria del coronavirus, en los que hemos reducido nuestra actividad y quien más quien menos se ha puesto a cocinar. Los dulces han estado a la orden del día, y se agotaron incluso las harinas y las levaduras en los supermercados. Y muchas personas han tenido que lidiar además con el hambre emocional, ese que nos lleva a comer por la ansiedad. No pocos han aumentado de peso. “Aunque no podemos bajar la guardia, ya estamos en plena desescalada y eso quiere decir que vamos a salir, y vestirnos con ropa normal, no el chándal y las prendas holgadas que hemos llevado todos los días… la conclusión es que debemos bajar de peso”, nos cuenta la farmacéutica Meritxell Martí.

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Elegir alimentos saciantes

“En cualquier época del año es aconsejable llevar una alimentación donde abunden frutas, verduras, legumbres, semillas y frutos secos. Estos alimentos no solo nos ayudan a estar saludables sino que nos mantendrán más saciados debido a su contenido en fibra y nos pueden ayudar, entre otras herramientas, a controlar las porciones que realmente necesitamos a lo largo del día. Además, estos alimentos vegetales son menos calóricos (excepto los frutos secos) y aportan una cantidad de agua a tener en cuenta para mantenernos bien hidratados, sin olvidarnos de mantener un buen consumo de agua, en este periodo donde la temperatura va en aumento”, nos cuenta Eva María Bautista, nutricionista de Blua de Sanitas, que añade que por otra parte tener un balance adecuado entre alimentación equilibrada y actividad física diaria nos puede permitir mantener un peso saludable.

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Frutas de temporada

La nutricionista de Sanitas apunta a que hay que tener en cuenta también que es interesante consumir en esta estación frutas y verduras de temporada (albaricoque, cerezas, nísperos, espinacas, acelgas, calabacín, etc), ya que se recoge en su punto óptimo de maduración y, por tanto, consumimos un alimento de mayor calidad y más sabroso. “Además ayuda a reducir la energía y las emisiones de CO2, favorecen a la sostenibilidad del planeta y supone una mejora de la economía del entorno al poder comprar frutas y verduras autóctonas”, nos cuenta.

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Directos a tu cesta de la compra

Aprovechando la estación de primavera podemos comprar los alimentos que con menos calorías nos ayudaran a perder esos kilos de más y a drenar. “¿Qué alimentos aconsejaría? Los que cumplieran al menos dos de estas características, no es necesario que sean todas a la vez”, nos cuenta Meritxell Martí:

1. Bajo índice glucémico.

2. Capacidad drenante.

3. Alto contenido en fibras.

4. Alto contenido hídrico.

5. Alto contenido en proteínas.

6. Bajo contenido en grasas.

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Espinacas

Pueden ayudar a perder peso, tanto si las comemos crudas en ensalada como si las comemos cocidas. Son muy ricas en clorofila, tienen alto contenido en vitaminas y, sobre todo, de minerales como el hierro. Tienen un alto contenido en fibra no soluble, lo que mejora el tránsito intestinal, y protege la mucosa del intestino. A su vez, son diuréticas si las incluimos tiernas en las ensaladas.

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Naranjas (aunque son de toda las épocas)

Tienen muy bajo contenido en glúcidos y alto contenido en fibras. Es buena idea optar por las naranjas sanguinas, que son más propias de primavera, así como algo más bajas en contenido en azúcares y cuentan con el mismo contenido en fibra y vitamina C. Del mismo modo, el pomelo va a ayudar a mejorar la eliminación de líquidos, tiene muy pocas calorías y mucha cantidad de fibra.

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Melón y sandía

Aunque los relacionamos inevitablemente con el verano, ya empezamos a ver en las fruterías estos deliciosos productos, que destacan por su muy alto contenido en agua. Sin embargo, no son muy saciantes, por lo que debemos ser precavidos en no comer más de la cuenta, ya que tal y como cuenta la experta, algún tipo de melón es muy dulce. Son altamente diuréticos y con pocas calorías.

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Albaricoque

Esta deliciosa fruta destaca por su muy alto contenido en fibra y su alto poder saciante. Es rica en vitamina C y baja en calorías y azúcares. Son, además, ricos en licopeno.

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Espárragos

Son muy drenantes y detoxificantes. En primavera nos pueden ayudar a eliminar líquidos, ya que son diuréticos y tienen un alto contenido en fibra, por lo que son saciantes, tienen poco contenido en calorías. Eso sí, procura no comerlos con mayonesa, pues ahí los estás dotando de un exceso de calorías. Son, además, ligeramente laxantes.

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Guisantes

Es un alimento muy rico en proteínas y en fibra, por lo que lo debemos incluirlo en las dietas para adelgazar. Tienen muy bajo contenido en calorías y, gracias a su fibra, son muy saciantes. Ayudan a disminuir el problema de estreñimiento.

Lentejas

Sabemos que las legumbres son de todo el año, pero sin embargo, en opinión de Meritxell Martí, las pequeñas lentejas en ensalada pueden ser un alimento perfecto en primavera para poder ayudar a adelgazar o a no coger kilos de más. Tienen pocas calorías y nada de grasa, un alto contenido en fibra, algo que ayuda a que nos sintamos saciadas, y a regular el tránsito intestinal. Su alto contenido en proteínas las convierte en buenas sustitutas de la carne.

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Alcachofas

Meritxell Martí nos matiza que aunque es una verdura de invierno, y en primavera estamos al final de su temporada, en esta época suele ser buenísima. Las alcachofas ayudan a mejorar la digestión de las grasas, así las eliminaremos más fácilmente. Son ligeramente laxantes y diuréticas, bajas en calorías y muy ricas en fibra. De hecho, tienen un alto contenido de inulina, una fibra insoluble que actúa como prebiótico que ayuda a evitar la hinchazón del estómago. Además, ayudan a disminuir el azúcar sanguíneo.