Los ejercicios de triceps no solo ayudan a fortalecer los brazos, también desarrollan potencia y equilibrio corporal. El más habitual, para hacer en casa, consiste en colocar dos sillas enfrentadas, apoyar los brazos extendidos en una y los pies en la otra. Baja levemente el cuerpo, sin llegar a tocar el suelo, sube con cuidado y repite entre cuatro y cinco veces.