Lo que comemos los humanos, no siempre es saludable para nuestras mascotas. Y aunque queramos compartir nuestros platos porque pensamos que son saludables (o queremos darle un capricho) nuestra buena intención puede pasarles factura. De hecho, ciertos alimentos pueden poner en peligro la vida de nuestros amigos de cuatro patas. Algunos de ellos son típicos en el menú de Navidad. 

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“Los dulces, el chocolate, las uvas y las pasas son tóxicos para los perros e incluso en pequeñas cantidades pueden causar daños en los órganos internos y, en casos extremos, la muerte", comenta Victoria Lorido, Vet Project Manager de AniCura Iberia. La experta indica que las clínicas veterinarias que forman parte de AniCura reciben durante estas fechas más mascotas con problemas derivados del consumo de alimentos  “Durante la temporada navideña, AniCura recibe significativamente más mascotas con problemas estomacales que en otras épocas del año. 

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Y es que las necesidades nutricionales y el aparato digestivo de las mascotas son distintos al de los seres humanos. En este sentido, ante un mismo alimento el organismo de los perros y gatos reacciona de una forma diferente. Los platos típicos de Navidad, por norma general, contienen un alto contenido en grasas y sal, que pueden causarles vómitos y diarrea. Además, este tipo de alimentos es alto en calorías y la obesidad en animales de compañía es un problema grave. De hecho, más de la mitad de los gatos (60%) y perros (56%) tienen sobrepeso u obesidad. 

Pero, además, también pueden sufrir intoxicaciones graves que no siempre dan la cara en el mismo momento en que se dan el festín. Victoria Lorido explica que “ciertos tipos de intoxicaciones alimentarias en mascotas presentan síntomas agudos, mientras que otros aparecen gradualmente después de unos días o incluso una o dos semanas". De ahí que la veterinaria recomiende que una vez producida la intoxicación, acudamos a la consulta veterinaria con rapidez. De este modo, el pronóstico a menudo es bueno, ya que se puede hacer un vaciado del estómago.

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Así que, si atrapas a tu mascota con la cabeza en el cubo de la basura o relamiéndose después de haberse zampado una caja de bombones, acude de inmediato a un veterinario. 

Estos otros alimentos también pueden poner en peligro la vida de tu mejor amigo. 

Marisco 

Es otro de los platos típicos del menú navideño. Y, aunque a nosotros nos pueda parecer muy saludable, lo mejor es que intentemos evitar que nuestro perro se lo coma. No son alimentos tan peligrosos como las uvas, las pasas o el chocolate pero en determinadas razas como el dálmata puede producir problemas como un ataque de gota, puesto que estos alimentos tienden a subir el ácido úrico. También hay que tener cuidado con las sobras. Nuestras mascotas están siempre pendientes de qué nos dejamos en el plato o si donde tiramos los restos. Si lo dejamos a su alcance, se pueden dar un festín con consecuencias para su salud. 

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Costillas 

Son recurrentes para el menú de los más pequeños (y los que no son tanto). Pero hay que tener mucho cuidado con ellas si tenemos animales en casa. Sobre todo, ojo con los invitados y los niños, que quizá no tengan tan en cuenta que puede haber un 'oportunista' bajo la mesa o en la cocina dispuesto a aprovechar un despiste. Las costillas, al igual que el pollo, contienen pequeños huesos que puede causar lesiones en el tracto digestivo del perro. En general, no es una buena idea dar a nuestros animales huesos, pero especialmente debemos evitar darles aquellos de menor tamaño y que se rompan con facilidad.

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Sofrito 

Los sofritos y salsas de muchas recetas navideñas se elaboran a base de grandes cantidades de cebolla y ajo. Estos alimentos no son saludables para nuestras mascotas. De hecho, las cebollas causan hemólisis, que puede dañar los glóbulos rojos y causar anemia grave.

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Polvorones

Ya sabemos que los dulces de navidad, como los polvorones y los mazapanes, son productos ricos en grasas y azúcar, sustancias que ni siquiera son buenas para nosotros si abusamos de ellas. En nuestros animales de compañía, suponen un aporte excesivo de azúcar que, a la larga, puede propiciar la aparición de problemas como la diabetes. Si nuestra mascota ya sufre esta enfermedad y, por accidente, se come varios polvorones, deberemos llevarle al veterinario para controlarle. En cuanto a las grasas, pueden provocarles problemas digestivos y, si las consumen habitualmente, obesidad, una patología que acorta su esperanza de vida. 

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Turrones

Los dulces están totalmente contraindicados para perros. Ni siquiera los que son bajos en azúcar. Estos pueden contener otro ingrediente, el xilitol, un edulcorante que se conoce también como azúcar de abedul. Esta sustancia tiene propiedades similares a la insulina en perros e, incluso, en pequeñas cantidades puede elevar el nivel de azúcar en la sangre. Las consecuencias pueden poner en grave riesgo la salud de tu mascota. Pueden producir convulsiones, coma y muerte. 

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Chocolate 

Es uno de los protagonistas de todos los dulces típicos de la Navidad y uno de los productos más típicos en nuestras mesas en estas fechas y durante todo el año. Pero también es uno de los alimentos menos recomendados para nuestros perros. El cacao contiene una sustancia denominada teobromina. En grandes cantidades, puede ser muy tóxica para nuestro animal de compañía. Conviene mantener alejados estos alimentos de su alcance para evitar una intoxicación por esta sustancia, que afecta al sistema nervioso central del animal.

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Uvas y pasas

Las uvas son uno de los alimentos con más arraigo en la Navidad española, pues son el elemento central sobre el que gira la tradición de las campanadas. Un perro que ha comido pasas o uvas puede sufrir daños irreversibles en sus riñones, que en el peor de los casos pueden ser fatales. Los signos y síntomas del daño renal a veces pueden aparecer gradualmente y no siempre son evidentes de inmediato.

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