"Nunca es demasiado tarde para empezar a cuidarse, y nunca demasiado pronto". Esa es una de las premisas de las que parte el nuevo libro -el primero destinado al público en general- del prestigioso cardiólogo español Valentín Fuster. En La ciencia de la salud (Planeta), que acaba de presentarse y que ha escrito en colaboración con el periodista Josep Corbella, el director del Instituto Cardiovascular del hospital Monte Sinai de Nueva York establece un catálogo de recomendaciones y sugerencias, en un lenguaje sencillo y ameno, para cuidar nuestro cuerpo, además de dar un toque de atención sobre los malos usos que nos están llevando a cifras de obesidad y de enfermedades cardiovasculares, cuando menos, preocupantes.
De hecho, el 47% de las muertes en mujeres y el 39% en los hombres se deben a enfermedades del corazón y las arterias (más que las muertes de todos los fallecidos por cáncer). Y, sólo en España, la obesidad, pieza clave en el desarrollo posterior de otras dolencias, afecta a un 23% de las mujeres y a un 18% de los hombres, lo que significa que una de cada cinco personas es obesa. ¿Qué está fallando? Fuster lo tiene claro: la prevención. Hoy en día, los médicos son capaces de salvar al 90% de los pacientes que llegan con un infarto a urgencias, pero no pueden evitar que los tengan. "Tal vez lo más coherente que pueda hacer ahora un cardiólogo para proteger la salud de los ciudadanos sea involucrarse en la prevención, explicar qué medidas son eficaces y cuáles no, cómo perder peso y no volverlo a ganar, cómo dejar el tabaco y no recaer, qué hay de cierto en la idea de que el vino es bueno para el corazón, en fin, aclarar todas esas cuestiones fundamentales para los ciudadanos", explica el cardiólogo.
Y todo ello sin prohibir, sin imponer. Y es que los médicos han de tener claro que no basta con dar consejos, sino que lo que hay que conseguir es que se sigan. El problema es que el número de personas que sufren infartos no deja de aumentar, lo que no deja de ser una paradoja, pues, cuando mayores son los avances en investigación y más sabemos sobre el funcionamiento del sistema cardiovascular, más personas fallecen por dolencias coronarias. Según Fuster, las razones son bastante obvias: nunca antes se habían registrado índices tan altos de sobrepeso, hipertensión, colesterol, diabetes y estrés; también en España, el supuesto 'paraíso' de la dieta mediterránea, donde, sin embargo, los índices de obesidad se están disparando. "Nunca habíamos tenido a tantas personas haciendo dieta y, sin embargo, el número de personas con obesidad es el más alto de la historia".
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