Un plan infalible si se quiere dar un toque verde y exótico a la decoración es apostar por alguna palmera de interior, como la areca (Dypsis Lutescens), la Licuala grandis, la palmera de salón (Chamaedorea elegans), o, por supuesto, uno de los best sellers, la kentia (Howea forsteriana).

Uno de los secretos del éxito de las kentias es sus fáciles cuidados pues no son excesivamente exigentes respecto a la luz ni tampoco a la humedad ambiental. Te revelamos todos los secretos para que esta atractiva palmera luzca sana y bella.

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Características estéticas de la kentia

Como muestra esta pareja de ejemplares de April Plants, se trata de una palmera con una base relativamente pequeña de la que crecen tallos delgados hacia arriba que llevan hojas brillantes y finas que dejan pasar la luz entre ellas. Se trata de hojas pinnadas o lo que es lo mismo, una hoja dividida en segmentos, que cuando crecen caen de forma arqueada, por lo que presenta un aspecto romántico y lánguido.

Respecto a la altura de esta exuberante palmera de profuso follaje, cultivada en maceta la kentia raramente superará los dos metros.

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¿He acertado con su ubicación?

Howea forsteriana, debe su nombre a su origen, la isla australiana de Lord Howe, y en plena naturaleza vive al cobijo de la sombra de grandes árboles. Así que, como decíamos al inicio del reportaje, puedes situarla en semisombra e incluso puede tolerar estar en zonas de poca luz, mientras que cuando es joven nunca hay que ponerla a pleno sol pues puedes quemar sus lindas hojas.

De hecho, para comprobar si has elegido un sitio correcto para ella fíjate en su color o comportamiento: cuando las hojas pasan a tener un color verde pálido a amarillo significa que está recibiendo excesiva luz pero, por el contrario, si está en una ubicación demasiado oscura, la kentia se desarrollará con pocos brotes nuevos y apenas crecerá. Es el momento de reubicarlas a un lugar óptimo para ella. Por ejemplo, asegúrate también de que tu planta esté protegida de las corrientes de aire y alejada de fuentes de calor.

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Riego de esta planta verde de tamaño ‘XXL’

En la época calurosa, deja la regadora a mano porque necesitarás emplearla dos veces por semana. Emplea agua no calcárea, como la de lluvia. Y en invierno espacia bastante la frecuencia de riego, es probable que necesites hacerlo tan solo dos veces al mes. Mientras que la tierra debe secarse ligeramente entre los riegos en las estaciones menos frías, en invierno sí debe secarse por completo.

Debes saber asimismo que está acostumbrada a los climas templados, así, el rango de temperaturas en las que se siente más cómoda se sitúa entre los 16º y los 24° C, si bien puede soportar frío de forma puntual.

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Tipo de suelo que necesita

La kentia va a pedir principalmente un suelo que facilite el drenaje, puede ser un sustrato arenoso, por ejemplo, al que añadas unos guijarros o bolas de arcilla en el fondo que eviten encharcamientos. De hecho, si seleccionas un sustrato específico para todo tipo de plantas verdes y palmeras, este ya permite una perfecta aireación.

Aparte, no está de más añadir abono de liberación lenta en primavera y verano, con tal de favorecer el crecimiento.

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Te pide muy pocas atenciones

Ya hemos comentado que de las palmeras de interior es una de las más seleccionadas y un motivo de peso para ello es que resulte tan fácil de mantener. Por supuesto, no requiere poda, simplemente retira las hojas secas para estimular su crecimiento y corta los extremos dañados de las hojas empleando siempre una tijera desinfectada.

Presta atención a sus hojas para que estén esplendorosas

Por otra parte, debes limpiar regularmente su follaje con un paño húmedo para eliminar el polvo acumulado y que recupere su brillo natural. Basta con estos sencillos gestos, por ello en muchas ocasiones hay quien no se conforma con una única kentia y cultiva un buen número de ellas, como podemos ver en la imagen.

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Promueve su mejor desarrollo

Se trata de una planta de crecimiento muy lento por lo que no será necesario cambiarla de maceta de forma anual. El trasplante de la kentia se realiza cada dos o tres años y siempre a principios de la primavera.

Por otra parte, solo se reproduce por siembra y cuesta hacerlo, por lo que la planta por regla general se compra de viveros. Y aunque la inversión inicial pueda parecer un poco alta, lo compensará que es una planta longeva (si la cuidas tal y como te indicamos debería vivir muchos años).

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Revisa la salud de tu kentia

La kentia no suele tener enfermedades ni sufrir plagas. En todo caso, recuerda que no le va a convenir el exceso de agua pues puede pudrir sus raíces o hacer que aparezcan hongos.

Respecto a sus enemigos, los más habituales en atacar esta palmera son la cochinilla algodonosa y la araña roja, plagas que suelen hacer su aparición especialmente durante los períodos cálidos del año, de modo que en verano te convendrá estar más vigilante.

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¿Por qué decorar mis interiores con kentias?

Por último, por si no tenías suficientes argumentos para decidirte por tener una kentia en casa, ¿sabías que nos ayuda a combatir el trastorno por déficit de naturaleza y reduce el estrés? Y se lleva de maravilla con animales y niños. Por otra parte, genera una notable sensación de volumen en un espacio reducido, por ello es elegida en muchos pisos urbanos por pocos metros que tengan. Pues a todo esto suma además que, como todas las plantas de gran tamaño, resulta perfecta para absorber el sonido de cualquier estancia, con lo que lograrás disminuir la contaminación acústica de tu hogar. En la propuesta, vemos la entrada de una vivienda situada en el bullicioso centro histórico de Palma de Mallorca, que reforma 353 Arquitectes.

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