El otoño, especialmente en sus primeras semanas, marca una etapa muy especial en el jardín. Todavía no hace demasiado frío, incluso puede que las temperaturas sean bastante cálidas, y muchas plantas de floración tardía se llenan de color y ricos aromas en una suerte de “primavera otoñal”. Toma nota de estas 9 plantas y conseguirás para tu jardín una estampa florida y realmente espectacular.

Esplendor otoñal en tu jardín

Una vez las plantas del jardín se recuperan del estrés del verano, provocado por las altas temperaturas y el sol intenso, sobreviene una etapa de transición antes de que lleguen los fríos rigurosos del invierno.

Es el otoño, una estación muy especial para el jardín en la que no todo es ocre. Hay numerosas plantas que tienen una floración tardía y que se llenan de flores en este momento. El resultado es un jardín otoñal alegre, colorista y muy especial. Hazles un hueco y disfrútalas al máximo.

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Sedum de otoño (Sedum spectabile)

Perteneciente a la familia de las Cassulaceae, el sedum de otoño es una planta resistente y fácil de cuidar. De tamaño medio, alcanza los 60 cm de altura y posee unas hojas de un bonito verde azulado.

Sin embargo, su verdadero encanto reside en las flores de pequeño tamaño que se agrupan en inflorescencias de color rosa y que atraen a numerosos insectos polinizadores.

El sedum es una planta que requiere un escaso mantenimiento. Soporta el frío y el calor, y no necesita mucho riego. Búscala un lugar a pleno sol, con un suelo bien drenado y rico en nutrientes.

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Dalia (Dahlia spp)

Plantar dalias en el jardín es una manera genial de llenarlo de belleza y color. El género incluye numerosas variedades que, aunque tienen algunas diferencias entre ellas, requieren de cuidados similares. Algunas dalias, debido a su floración tardía, son perfectas para jardines otoñales.

Para conseguir que crezca en todo su esplendor, hazle un hueco en un rincón luminoso a salvo de vientos fuertes, y procura que el sustrato donde la plantes sea rico en nutrientes y esté bien drenado, ya que no tolera los encharcamientos.

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Brezo (Calluna vulgaris)

¿Necesitas un arbusto especial para crear masas de color en otoño? El brezo es la planta que buscas. Sus diminutas flores dispuestas en espigas teñirán de rosa tu jardín hasta bien entrado el invierno.

Además, el brezo te dará muy pocos quebraderos de cabeza, ya que es tremendamente fácil de cuidar. Soporta el frío sin problemas y necesita poca agua. Además, puedes cultivarlo en maceta. Para conservar su forma y su aspecto saludable bastará con que lo podes en primavera.

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Aster (Aster)

Es una de las estrellas del jardín otoñal. Una planta herbácea que florece de forma abundante en otoño y en invierno creando masas de color perfectas para macizos o también para crear borduras.

Sus flores tienen la forma de las margaritas, y pueden ser de color morado, rosa, magenta, fucsia o violeta, dependiendo de la especie (hay en torno a 180 diferentes). Algunas de las variedades más habituales en los jardines son: Aster nova-angliae, Aster nova-belgii, Aster cordifolius y Aster amellus.

Entre los cuidados esenciales que requieren destacan la luz (plántalos en un emplazamiento luminoso) y los suelos sueltos y bien drenados.

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Anémona de otoño (Anemona hupehensis)

Es una planta especial que adorna el jardín en esta época con unas flores bellas y delicadas cuyos colores pueden ir del blanco al rosa más oscuro. Esta variedad de anémona, también conocida como anémona de Japón, a pesar de su origen chino, puede alcanzar los 30 o 40 cm de altura. Aislada o en grupo, será una de las joyas otoñales de tu jardín.

La Anemona hupehensis necesita muy pocos cuidados. Debes ubicarla en una zona sombreada y regarla lo suficiente para mantener el suelo húmedo pero sin encharcar. No te preocupes por el frío, ya que tolera estoicamente las grandes heladas invernales. Sin embargo, en verano le vendrá bien que hagas un acolchado con mantillo para proteger sus raíces del calor intenso.

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Helenio (Helenium autumnale)

Es otra de las plantas de otoño, como su propio nombre científico indica. Los helenios se convierten en protagonistas del jardín en esta época del año, gracias a sus magníficas flores similares a las margaritas pero de intensos colores cálidos, muy propios de la estación: amarillo, naranja, rojo, etc.

Cultivar el helenio es sencillo. Le gusta estar a pleno sol, en un terreno rico en nutrientes y con un riego regular que no deje que se seque en exceso. ¿Quieres alargar su floración? Elimina las flores marchitas y ayudarás a tus helenios a generar otras nuevas.

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Salvia (Salvia spp)

La belleza de flores de la salvia es todo un espectáculo en el jardín que le confiere una nota silvestre muy decorativa. Existen muchas especies de salvias, en torno a 900, muchas de las cuales florecen en otoño: algunas lo hacen en forma de espigas azuladas y otras con flores rojizas.

Las salvias son plantas resistentes que soportan las temperaturas extremas. Plántalas a pleno sol y riégalas generosamente aunque de forma espaciada en el tiempo, evitando los encharcamientos que les perjudican bastante.

Entre las especies más recomendables para los jardines de otoño destacan la Salvia nemorosa, la Salvia microphylla y la Salvia leucantha, entre otras.

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Crisantemo (Chrysanthemum spp)

Son plantas muy decorativas de fácil cultivo que hacen gala de una abundante floración otoñal con bellos ejemplares de colores diversos que van desde el rosa al violeta.

Puedes plantarla en el suelo del jardín y también en maceta, siempre que la ubiques en un emplazamiento soleado o, puntualmente, en semisombra

Cuando pierda las flores y llegue el invierno puedes hacer dos cosas con tus crisantemos. Si los has plantado en maceta lo mejor es trasladarlos al interior, y colocarlos en una habitación luminosa. Si están en el suelo del jardín, corta la parte aérea de las plantas y protege las raíces con un buen acolchado. Tus crisantemos resurgirán en primavera en todo su esplendor.

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Pensamiento (Viola x Wittrockiana)

Es una planta sencilla que florecerá en la segunda mitad del otoño y cuyas flores perdurarán durante todo el invierno. Plantar pensamientos en el jardín es una gran idea para aportar color y belleza de forma fácil y sin complicaciones.

Puedes elegir entre diferentes variedades, con flores de diferentes tamaños y colorido, aunque todas son de fácil mantenimiento y gran belleza. Necesitan sol, riego moderado y un abono para plantas de flor de vez en cuando.

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