Cuando hay una escalera dentro de la vivienda, esta se convierte en una zona especial. Se trata de un elemento arquitectónico con mucho peso dentro de la decoración y que no puede ser olvidado. Su diseño y elección de materiales organizan el espacio e intervienen en el estilo decorativo del conjunto. Nos fijamos en la línea de la escalera, los materiales y la forma en que se resuelve la estética de las paredes cercanas. ¡Todo cuenta!
Una escalera muy liviana
Peldaños que parecen sujetados por cordones al techo. Ese es el efecto que logra el diseño de una escalera con peldaños volados. Nacen de una pared, se organizan en línea y suben sin contrahuella, lo que hace que resulte aún más ligera la escalera. Tubos de metal hacen de barandilla para dar seguridad sin llenar visualmente, como elementos lineales que alcanzan el techo. El metal negro es aquí el material protagonista, que destaca en una base de pared pintada en tono neutro, lisa, en busca del contraste. En ese frente ningún elemento decorativo, salvo el ventanuco que se encuentra al inicio de la escalera. La sencillez y simplicidad se han buscado en el diseño de la escalera en sí y en el del las paredes que la enmarcan.
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