El esperado regreso del Salone del Mobile de Milán, cita ineludible para los amantes del interiorismo que celebró su 60ª edición el pasado mes de junio, no solo mostró las tendencias por las que apuestan las principales firmas de diseño internacionales, sino que constató hasta qué punto estas se han visto influenciadas por la situación vivida a raíz de la pandemia. La feria del mueble certificó que el salón es uno de los espacios que más adaptaciones tuvo que realizar (sobre todo durante el período de confinamiento), por lo que vive una interesante evolución de la mano de espacios híbridos, muebles multifunción, materiales sostenibles que apuestan por la economía circular, así como por formas y colores que abogan por la slow life.

El ambiente de la imagen, revestido con el material ultracompacto Dekton en su nueva colección Onirika (realizada junto a la interiorista Nina Magon y presentada en primicia en el certamen), recoge un buen número de estas tendencias: un ambiente diáfano y sereno, con la belleza natural de los marmoleados, higiénico y de fácil limpieza, pensado para acompañarte durante toda la vida.

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Funciones ocultas

Los usos cada vez más diversos del salón, combinados con una estética diáfana y despejada, dan lugar a una creciente oferta de equipamiento ‘visto y no visto’. Los panelados (otra tendencia al alza en toda la casa) sirven para ocultar completos programas como Surprise, una boiserie diseñada por Fratelli Boffi para que parezca, simplemente, una pared revestida de madera maciza con una refinada superficie acanalada. En su interior, no obstante, oculta una extraordinaria serie de módulos y componentes, diseñados para satisfacer diferentes usos.

Totalmente realizada en arce con acabado semibrillante, gracias a su ‘alma móvil’ permite amueblar diferentes espacios de la casa gracias a las numerosas posibilidades de personalización de los componentes internos. Puede estructurarse con elementos de barra pivotante que giran sobre un pivote central y ofrecen numerosos compartimentos y soportes para vasos y botellas, pero también puede equiparse con módulos de armario, o incluso transformarse en una compacta home office o mueble de televisión para el salón.

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La nueva modularidad

Las composiciones modulares cobran un creciente protagonismo, de la mano de diseños impactantes y de las infinitas posibilidades de personalización que ofrecen las nuevas series.

Un buen ejemplo de ello es la librería Avenue, de MD House (en la imagen) que puede configurarse a voluntad combinando módulos de diferentes tamaños y usos (permite incluso albergar el televisor), incorporando iluminación perimetral opcional e integrando muebles altos y bajos para crear llamativos efectos gráficos. Fabricada en metal con recubrimiento de polvo, es una propuesta sostenible, ya que el material es 100% reciclable.

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Muebles para compartir… o independizarse

Los nuevos sofás se convierten en auténticas islas polifacéticas, flexibles y multifuncionales. En el sofá se descansa pero también se trabaja, se juega con los niños, se reúne a los amigos… Testigo de escenas de la vida siempre cambiantes, el sofá se transforma para adaptarse a cada una de ellas y da lugar a piezas tan singulares como Bordone, de MyHome Collection (en la imagen) cuya particularidad es la posibilidad de insertar elementos como sillones giratorios (perfectos para conseguir un poco de privacidad incluso en un espacio compartido) o pufs de diferentes tamaños, según las necesidades de cada uno.

Disponible en diferentes acabados, cabe destacar sus líneas redondeadas, muy a la última, así como la tapicería fabricada con un tejido especial 100% reciclado a partir de botellas de PET recuperadas de residuos marinos (unas 400 para un sofá de tamaño medio). El tejido tiene una textura suave y aterciopelada, con altas prestaciones de resistencia y fácil de limpiar.

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Sofás que te arropan

Lo reiteramos, las formas curvas y orgánicas son otra de las características que comparte un buen número de los nuevos asientos que pudieron verse en el Salone. Cojines mullidos (que, en algunos casos, parece que invitan a hundirse en ellos y desaparecer por un rato, como en la propuesta de Cor de la imagen, el modelo Jalis), conviven con piezas que definen perfectos semicírculos de formas mucho más definidas, pero no dejan lugar a dudas sobre su protagonismo entre las novedades tras años de sofás de líneas rectas y angulosas.

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‘Mix & match’: combinación de materiales y funciones

Y seguimos con los sofás, piezas estrella del salón hasta el punto de asumir nuevas funciones propias de otros muebles auxiliares. Las últimas series modulares permiten realizar todo tipo de composiciones que aún resultan más diversas gracias a la combinación de materiales, otra tendencia que sigue creciendo con fuerza de la mano de la personalización.

Así, por ejemplo, la colección de muebles tapizados Memphis, de la firma Rugiano presenta una base metálica lineal de corte muy elegante y detalles de cuero para las versiones tapizadas en piel. La base, con mesas de mármol integradas, permite crear diferentes composiciones en función del espacio. Y, para reforzar la idea de mix & match capaz de enriquecer cualquier espacio, se ofrece una variante especial con respaldos y apoyabrazos entrelazados con cuerda de terciopelo.

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Formas geométricas que desprenden calidez

El minimalismo sigue siendo una tendencia estrella, sobre todo cuando cada vez son más los usos que se le piden a un espacio, pero, debido a las duras circunstancias vividas en los últimos dos años, se reviste de una mayor calidez.

La madera juega aquí un papel clave (también desde el punto de vista de la sostenibilidad y el respeto medioambiental), ya que su belleza natural es capaz de aportar una nota amable hasta al proyecto más esencial.

Un buen ejemplo de este delicado equilibrio entre minimalismo y calidez es Velasca, un contenedor lineal, diseñado por Ludovica+Roberto Palomba para Punt Mobles, que combina funcionalidad aportando calidez y textura al espacio, gracias a las puertas grabadas con un patrón vertical, en el que el componente artesanal le confiere un acabado escultórico.

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Salones para disfrutar con todos los sentidos

Pese a las mayores exigencias de higiene que nos ha acarreado el coronavirus (y los materiales funcionales que han traído consigo), lo cierto es que la estética de los nuevos salones vistos en Milán es cualquier cosa menos aséptica. El forzado aislamiento que sufrimos en 2020 ha hecho que nos inclinemos por paletas cromáticas mucho más variadas (que tienen una gran influencia en aportar optimismo), así como por materiales de texturas ricas para disfrutarlos no solo con la vista, sino también desde una perspectiva táctil. Damos la bienvenida a un interiorismo emocional que tiene un objetivo principal: aportarnos bienestar y confort.

Lo dejó muy claro la marca veneciana Instabilelab que, en su primera participación en el Salone del Mobile, presentó su Milano Collection, que incluye combinaciones del papel pintado Velluto (que recuerda las suaves texturas y percepciones táctiles del terciopelo) y las alfombras Carpetia Royal (disponibles en formas rectangular y redonda y en diferentes tamaños).

Con diez diseños inspirados en la alta costura (como no podía ser de otro modo con la capital de la moda como fuente de inspiración), el resultado son ambientes muy bien vestidos que se adaptan a cualquier estilo decorativo. El de la imagen se inspira en los grafismos coloristas propios de los años 60’, aunque también hay propuestas más tranquilas (que evocan la naturaleza) e incluso conceptuales.

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La ecología como estandarte

Ya nadie duda de la urgencia de tomar medidas frente a la emergencia climática y la industria del diseño ha aceptado el reto con ganas (y muchas ideas). Prácticamente todas las novedades presentadas en la feria hacían suya la cuestión de la sostenibilidad, ya fuera mediante el uso de materiales renovables (o incluso directamente procedentes del reciclaje de otros) como de un concepto de producción respetuoso con el medio ambiente y piezas pensadas para durar.

Un buen ejemplo de ello es la línea de alfombras Reversible, de Gan, realizadas con una nueva técnica, desarrollada expresamente para esta colección, que permite combinar hilos de distintos grosores y materiales, para dar lugar a dos acabados totalmente diferentes en una misma pieza: 100% lana virgen, por un lado, y lino por otro. De este modo, las alfombras de la serie permiten adaptar los espacios a las estaciones, con todos los beneficios de estas fibras naturales para aportar calidez o frescor al ambiente.

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Efecto sorpresa

También hay espacio para el asombro entre las últimas propuestas de los diseñadores. Un buen ejemplo de ello es el puf Link de Sancal (a la izquierda) a base de ‘argollas’. Se trata de una colaboración de la marca murciana con el estudio de diseño Raw Color, que se inició durante los primeros días de la pandemia de la COVID-19 y que viene a demostrar que la ilusión no es solo un estado de ánimo, sino que se puede traducir en forma de luz, sombra, color y volumen en geometrías suavemente redondeadas. De este modo, se transforma un objeto cotidiano en una escultura que, además, ofrece un enfoque libre y cambiante de los asientos, para responder a cualquier contexto, uso y entorno: desde el más lúdico al más decorativo.

De los mismos creadores es el sofá Loop, disponible en multitud de tamaños y de tapicerías lisas o multicolores.

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Un salón… ¡de juegos!

Los muebles capaces de realizar más de una función según el momento son cada vez más populares, aunque no puede decirse que sean una novedad. Lo que sí lo es son algunos de los nuevos usos que incorporan. Y es que, a nadie se le escapa ya que la sala de estar ha incorporado entre sus funciones la de área de juegos y gimnasio doméstico. Más que nunca ya no es donde permanecer inactivo, todo lo contrario.

Es por ello por lo que, en un momento en el que la gamificación vive un creciente auge, no es extraño encontrar muebles que incorporan una faceta lúdica, como la nueva mesa de ping pong Blade, de Vismara Design. De diseño lineal y esencial, la estructura de la mesa está totalmente tapizada en cuero, a excepción de la superficie de juego, que es de madera, y, además de incluir todos los accesorios para practicar este tenis de mesa (red extraíble, raquetas y pelotas) dentro de un cajón oculto, está diseñada para ser utilizada también como mesa de comedor o incluso de reuniones.

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