Los trabajos de bricolaje hechos con tus propias manos resultan muy satisfactorios. Y todavía más si son tan especiales y decorativos como el que te traemos a continuación: un biombo de rejilla de ratán muy resultón. Para hacerlo no necesitas ser un experto en carpintería. ¡Descubre cómo conseguirlo!

Razones para tener un biombo en casa

Puede que te parezca una pieza poco práctica. Nada más lejos de la realidad. Un biombo se puede convertir en un elemento imprescindible en tu hogar, dadas las muchas funciones que puede llegar a cumplir.

Para empezar es un estupendo separador de ambientes si tu casa es diáfana y necesitas dividir el espacio. Los biombos son ligeros, fáciles de trasladar de un lugar a otro y, al ser plegables, se guardan en cualquier rincón.

¿Tienes un biombo que te encanta? Utilízalo a modo de panel decorativo, por ejemplo, en el dormitorio, en la pared del cabecero de la cama.

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Muy práctico en la zona de trabajo

Si eres de los muchos que teletrabajan en casa, seguramente contarás con un espacio acondicionado para este fin. Una mesa de escritorio, por ejemplo, con soluciones de almacenaje adecuadas que te ayuden a concentrarte mejor.

Cuando no existe la posibilidad de trabajar en un estudio o despacho independiente, es posible emplear un biombo para separar el puesto de trabajo del resto del salón. Será una gran idea, ya que te ofrecerá una superficie genial para hacer un pequeño panel de notas, o para crear un moodboard o collage de ideas que pongan a trabajar a tu imaginación. Puedes sujetar en él fotos, dibujos, etc. con pinzas o ganchos apropiados.

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Tendencia 'cannage'

Los muebles y elementos decorados con rejilla de fibras vegetales están de plena actualidad. Aunque no son nuevos, sino que esta técnica era ya habitual hace décadas, hoy están experimentando un resurgir digno de tener en cuenta.

El cannage es un trenzado de fibras vegetales que da como resultado una rejilla resistente con la que se completan ciertos muebles. Se usa, por ejemplo, en puertas de armario, en el respaldo de las sillas y butacas, o en los paneles de los biombos como en el que te enseñamos a hacer hoy.

En general los muebles de cannage son ligeros, frescos, muy naturales y en algunos casos aportan a la decoración un toque vintage muy especial. La rejilla, de fibras vegetales, suele ser de ratán, mimbre o caña.

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Hazlo tú mismo

Aprovechando el tirón que tienen los muebles de rejilla de fibras vegetales puedes construir tú mismo un biombo al más puro estilo cannage. Para ello es posible reciclar los laterales de la estantería IVAR de Ikea, de madera de pino natural sin tratar. Si tienes una en casa y ya no la necesitas, puedes convertirla en un biombo genial.

Un consejo: si el proyecto te encanta y no tienes una estantería IVAR en casa, puedes comprar los laterales sueltos, que también están a la venta en varios tamaños. Para este trabajo debes utilizar tres piezas de 50 X 179 cm.

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Los materiales y herramientas necesarios

Además de los tres laterales de madera IVAR, te harán falta otros materiales como la rejilla de ratán natural que se vende en rollo en tiendas de manualidades y bricolaje.

También necesitarás seis bisagras pequeñas de latón, varilla redonda de madera de poco grosor (de uno 1,5 cm de diámetro aproximadamente), cola o adhesivo para madera, listones del mismo grosor que los de la estructura IVAR.

En cuanto a las herramientas, busca una sierra pequeña (como las de arco), una grapadora de pistola (con grapas), un destornillador, tijeras, metro y lápiz.

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Paso 1: Coloca la rejilla de ratán

Lo primero que debes hacer es medir y cortar la rejilla de ratán para fijarla a los laterales de madera. Si está muy enrollada y te resulta difícil de manejar, puedes humedecerla ligeramente para que puedas estirarla más fácilmente.

Una vez cortada a la medida, fija la rejilla por la parte posterior de la estructura con la grapadora de pistola procurando que quede tensa. Puedes tapar las grapas con los listones de pino para conseguir que el biombo quede igual de vistoso por ambos lados.

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Paso 2: Refuerza el resultado

Corta la varilla a la medida adecuada para colocarla en el marco interior del biombo, de forma que la instalación de la rejilla quede reforzada.

Mide bien los espacios entre los listones horizontales antes de cortar la varilla. Para fijarla a la estructura emplea cola de madera. Fija también varilla de madera en la parte posterior del biombo.

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Paso 3: Monta el biombo

Una vez tengas preparados los tres paneles del biombo colócalos de forma que los extremos más largos queden en la parte inferior, a modo de patas. Después atornilla tres bisagras en la parte trasera de dos de los paneles para unirlos, y en la parte delantera del panel restante, de forma que el biombo pueda plegarse en zigzag. Con este último paso termina el montaje.

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El mantenimiento adecuado

Las fibras vegetales como el ratán son resistentes y fáciles de limpiar. No requieren demasiados cuidados, más allá de eliminar el polvo con un paño suave ligeramente humedecido en agua con sal o en una solución de agua y bicarbonato.

Si tiene manchas profundas frota con un cepillo y una mezcla de agua, jabón neutro y amoniaco y verás como desaparecen. Después seca muy bien la fibra para evitar que se eche a perder con el agua.

Aunque las fibras vegetales se estropean si se mojan, puedes colocarlo en zonas de exterior, siempre que esté a resguardo de la lluvia y de los rayos directos del sol (hacen que pierda el color).

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