Paso 4: Imprimación
Necesitarás:
Este es un paso vital a la hora de dar un nuevo color a tus paredes. La imprimación es una base líquida que se aplica antes de pintar para preparar la zona sobre la que vamos a trabajar. Este fondo o sellador es un recubrimiento previo que sirve de base a la pintura de acabado y se aplica para consolidar, igualar y facilitar la absorción de la pintura.
Es importante aplicar la imprimación adecuada para que los trabajos posteriores sobre esa superficie tengan un buen acabado. Para ello debemos emplear una imprimación específica. Según la composición de la imprimación, estos productos se clasifican en imprimaciones acrílicas o sintéticas.
Los expertos de Leroy Merlin recomiendan elegir la base de la imprimación del mismo tipo que la pintura que vayamos a aplicar posteriormente y, si no es posible aconsejan esperar 24 horas antes de aplicar la pintura final sobre la superficie.
Nos cuentan las diferencias que hay entre ellas:
• Imprimación al agua o acrílica: es casi inodora, respetuosa con el medio ambiente por estar compuesta más naturalmente que la sintética, fácil de aplicar y de limpiar los útiles de pintura, porque para ello solo se necesita agua y jabón.
• Imprimación al disolvente: es la imprimación sintética que obliga a limpiar los útiles de pintura con disolvente o aguarrás. Destaca por su resistencia y su alta capacidad de cubrición. Su tiempo de secado es mayor que la opción acrílica y desprende olor.
Para este paso a paso concretamente se emplea la imprimación universal Luxens de 5 litros, cuya etiqueta Ecolabel certifica que es respetuosa con el medio ambiente y la salud de las personas. Como el resto de productos y herramientas, está disponible en Leroy Merlin.
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