Decorar un pasillo largo y estrecho y convertirlo en un espacio agradable y cálido no es tarea fácil. Son rincones oscuros, a veces angostos, que no invitan a estar y que tampoco cuentan con los metros cuadrados necesarios para resultar funcionales y prácticos.
Sin embargo, siempre existen alternativas que mejoren la apariencia de un pasillo, y muchas veces son más sencillas de poner en práctica de lo que podría parecer.
Efecto óptico
Hay pasillos que son muy largos. Se extienden ante ti como un interminable corredor que conecta (o más bien separa) dos zonas de la casa. Atravesarlos no es agradable porque no tienen ningún interés, ni nos ofrecen estímulos a nivel decorativo.
Pero eso puede cambiar drásticamente si te pones manos a la obra y desarrollas algunas de las ideas que vamos a explicar. Podrás transformar tu pasillo para que deje de ser un lugar hostil y sea un espacio dinámico e interesante, perfectamente integrado en el interiorismo de tu casa.
Para empezar, si es muy largo, tendrás que acortarlo visualmente. ¿Cómo? Rompiendo la perspectiva con elementos verticales: puede ser un mueble, un cuadro, etc. Es importante evitar todo aquello que remarque la horizontalidad, como estantes volados, especialmente si son largos.
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