A pesar de que el frío y las bajas temperaturas marquen la pauta climatológica durante estas semanas, no por ello nuestro jardín tiene que quedar arrasado como si de un erial se tratase.

Existen numerosas especies perfectas para cultivar en los meses de invierno. Una de ellas es la col ornamental, también conocida como col de jardín, una planta que no es apta para consumir como alimento pero que resulta perfecta para decorar y alegrar el exterior de tu casa.

La joya de tu jardín invernal

La col ornamental (Brassica oleracea) es una planta vivaz muy resistente al frío que convertirá a tu jardín en un paraíso a pesar de las temperaturas gélidas de estos meses.

De hecho, uno de los alicientes para sembrarla es la belleza de sus hojas rizadas y de sus colores tan especiales, que se intensifican con el frío. Aunque existen diferentes variedades, todas ellas son de pequeño tamaño, ya que solo crecen hasta los 25 o 30 cm.

Una perfecta combinación de colores

Parece una coliflor o más bien un repollo y, sin embargo, hace gala de una rara belleza que te cautivará. La col ornamental posee un cogollo central de un color intenso que se va aclarando en las hojas exteriores.

También se producen cambios de color muy originales y combinaciones de lo más decorativas, en función de las diferentes variedades que existen. Verde, morado, rosa y blanco, con diferentes matices e intensidades, la convierten en una planta estrella.

El mejor lugar para crecer

Busca a la Brassica oleracea el mejor emplazamiento en tu jardín, donde pueda recibir la suficiente luz pero sin estar a pleno sol. No es que no lo soporte, pero le gustará más estar en semisombra sobre todo en verano cuando el calor sea intenso.

La col ornamental es una planta muy adecuada para crear macizos decorativos.

La siembra de la col ornamental

Aunque hay quien prefiere sembrar las semillas de Brassica oleracea en semillero, también se puede hacer directamente en el suelo del jardín donde quieras ubicarla.

Si te decides por la primera opción, tendrás que trasplantar las plantitas cuando alcancen los 8 o 10 cm, algo que sucederá en poco tiempo.

La época ideal para sembrar la col ornamental es el verano, pero hay variedades que se plantan en otoño.

No es planta para interior

Puede que te guste tanto la col ornamental que quizás hayas pensado en plantarla en una maceta y tenerla dentro de casa, decorando tu salón o cualquier otro espacio. Pues siento decirte que no es buena idea.

Esta preciosa planta ama el frío y no está a gusto al calor del hogar. Es una especie de exterior que crecerá con fuerza incluso con temperaturas bajo cero.

¿Sabes cuál es el sustrato adecuado?

Ya sabemos que la col ornamental es una planta fácil de cultivar. Los cuidados que necesita son sencillos, poco exigentes, lo que se convierte en un importante aliciente para sembrarla en nuestro jardín.

Sin embargo, conviene elegir bien el sustrato para que esté siempre esplendorosa. A la Brassica oleracea le gustan los suelos fértiles y bien drenados, ricos en materia orgánica, ya que requiere bastantes nutrientes para desarrollarse.

Una buena dosis de energía

Un mes después de sembrar las coles ornamentales conviene aportar al suelo un plus de nutrientes en forma de abono orgánico, ya que se trata de una especie exigente en este sentido. Esto se hace más necesario si las plantas en otoño.

Utiliza un fertilizante adecuado y verás cómo tus Brassicas crecen con fuerza.

Riego abundante y regular

Aunque el riego de la col ornamental ha de ser abundante, es importante que el sustrato esté siempre bien drenado, ya que esta planta no tolera los encharcamientos, fatales para las raíces.

La regla más importante para regar con éxito la Brassica es hacerlo cuando detectes que el sustrato comienza a secarse. Ten en cuenta que si le falta el agua no podrá desarrollarse adecuadamente y si te pasas con el riego será más vulnerable a los hongos como el mildiu.

También puedes llevar a cabo un acolchado o mulching para preservar la humedad del sustrato. Para ello tapa el suelo alrededor de las plantas con materia orgánica como paja, corteza de pino o restos de poda.

Protege tus coles de las plagas

Puede que no se trate de una col como las que crecen en el huerto, pero las Brassicas resultan igualmente atractivas para las plagas, en especial para los pulgones y los gusanos.

Para proteger tus plantas debes prestar atención a la aparición de insectos y actuar cuanto antes aplicando un insecticida adecuado.