La estética también importa
Durante mucho tiempo, uno de los principales inconvenientes para elegir una silla ergonómica para el escritorio era la estética, ya que este tipo de asientos no resultaban muy decorativos en determinados ambientes.
Puede que fuesen muy cómodas, ergonómicas y prácticas, pero la mayoría resultaban demasiado aparatosas y mostraban unas líneas que no armonizaban en absoluto con el resto de los muebles de tu estudio o del salón.
Algunos modelos se integraban en espacios de corte vanguardista, pero no ocurría lo mismo cuando se trataba de ambientes clásicos, por ejemplo.
Sin embargo, ahora es posible encontrar sillas de escritorio de diferentes diseños: modernas, minimalistas, de corte industrial, etc. Para poder trabajar a salvo de contracturas musculares sin perder por ello ni una pizca de estilo.