Errores comunes, ¡no los cometas!
Aunque la limpieza y el cuidado diario de los muebles no tiene por qué ser una tarea compleja, hay ciertas costumbres que solemos repetir que no les benefician en absoluto. Al caer en estos errores estamos estropeándolos sin darnos cuenta:
- Colocar los muebles en el lugar equivocado. A la hora de buscar el sitio perfecto para tus muebles de madera, procura no ponerlos cerca de un radiador o junto a una ventana por la que entre el sol. El calor hace que se sequen mucho y puedan agrietarse y el sol los decolora.
- Mojar la madera. La humedad es uno de sus grandes enemigos, así que procura no mojar la parte inferior de los muebles y las puertas cuando friegues el suelo con la fregona.
- Utilizar productos equivocados, demasiado agresivos, que dañen los muebles. Antes de aplicar cualquier producto o tratamiento sobre un mueble, ten la precaución de probar primero en un lugar poco visible para asegurarte de que no será peor el remedio que la enfermedad.