En 1904 se inauguró la primera línea de metro de Nueva York con este azulejo (del que toma su nombre) revistiendo las paredes de los túneles. Más de un siglo después es un icono decorativo entre los revestimientos. Las baldosas tipo metro han estado presentes en las casas desde entonces, tanto en estilos retro como en los más actuales. Hoy sigue siendo un revestimiento de tendencia tanto en su forma pura como en las versiones actualizadas.
Un clásico en blanco
Nunca falla. La versión original es esta que ha usado la interiorista Pia Capdevila en el frente de la zona de trabajo de esta cocina. Azulejo blanco de superficie lisa pero con imperfecciones y rebajada en los cantos. La cocina y el baño son de los ambientes en los que más se utiliza este tipo de revestimiento. Aunque no los únicos. Reviste todas las paredes, una solo, crea un zócalo a media altura, úsalo solo en la zona de cocción…
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