¿Te gusta lo clásico y elegante?, ¡apúntate al estilo inglés!

Si tu gusto está reñido con lo contemporáneo esta tendencia decorativa es la tuya

Por hola.com

Si eres de esas personas que no soportan el estilo minimal y lo que realmente te apetece es ver el salón recargado y con maderas porque tu gusto se decanta más por lo clásico, sin duda alguna, el estilo inglés es el más apropiado para tu casa.  Pero cuidado, no resulta fácil que todos los elementos queden perfectos, debes tener mucho cuidado al elegir el mobiliario, las lámparas y los accesorios que acabarán decorando la estancia para lograr ese toque clásico tan fascinante.

La opulencia es la máxima
Uno de los materiales básicos a la hora de decantarte por el estilo inglés es  la caoba. Podríamos decir que es el elemento clave. Absolutamente todo el mobiliario debe estar elaborado a base de esta madera que combina a la perfección la elegancia y la distinción de los salones ingleses más clásicos.

En cuanto al resto del mobiliario, los sofás y las butacas conocidas como Chester son también componentes fundamentales para lograr una decoración de este tipo. Sus brazos son curvados y el respaldo no tiene demasiada altura. Las butacas de cuero resultan muy cómodas y suelen ir adornados con algunos elementos decorativos como botones o tachuelas cubiertas con el mismo cuero que el resto del asiento.

Otro detalle que no debe faltar nunca son las lámparas de araña y, por supuesto, los elegantes y estilizados candelabros, muy tradicionales en el clasicismo propio de la decoración al más puro estilo british.

Cuero, caoba y tonos marrones
Si además eres aficionada a la lectura, otro elemento que no puede faltar son las enormes bibliotecas abarrotadas de libros, que, si tienes la suerte de que tengan un aspecto antiguo, harán del salón un rincón de Gran Bretaña en tu propia casa.

En cuanto a los colores de las paredes, el estilo inglés admite diversas tonalidades, aunque siempre suelen decantarse por los tonos marrones, grises o verdes, sin olvidar por supuesto el blanco, aunque en el caso de que ninguno de ellos te llegue a convencer siempre puedes usar los colores pastel que también resultan muy armónicos con el resto de la decoración.

Sobre el escritorio podrás colocar plumas y agendas de cuero y sobre la mesa del salón algún tablero de ajedrez, incluso encontrarás globos terráqueos antiguos a modo de minibar que le terminarán de dar ese toque tan especial y sobre todo tan elegante que requiere este tipo de decoración.