La carne de pavo es magra y muy sabrosa, además de una de las más sanas por su bajo contenido en grasa. También es cierto que tiende a quedarse un poco seca, por lo que esta preparación, en forma de albóndigas, es ideal, ya que incorporamos a la carne elementos como el huevo o el pan rallado que le aportan cierta jugosidad y las bañamos con salsa de tomate, a la que damos un toque picante con un poco de salsa 'harissa'.
- 500 g de Carne picada de pavo
- 2 ud de Cebolla
- 500 g de Tomates
- 2 dientes de Dientes de ajo
- 1 ud de Huevos
- 200 g de Cuscús precocido
- 2 cs de Pan rallado
- 3 cs de Harina
- 10 cs de Aceite de oliva virgen extra
- 1 cucharadita de Harissa
- Sal
- Pimienta negra
- Eneldo picado para decorar
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1.
Pela y pica los dientes de ajo y échalos en un cuenco con la carne de pavo picada, 1 huevo, sal y pimienta recién molida.
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2.
Añade el pan rallado y mezcla bien.
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3.
Forma pequeñas albóndigas con las manos enharinadas y resérvalas.
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4.
Pela y pica las cebollas.
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5.
Pela los tomates, elimina las semillas y pica la pulpa.
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6.
Calienta en una cazuela grande 2 cucharadas de aceite y rehoga la cebolla picada durante 5 minutos.
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7.
Añade la pulpa de tomate, la 'harissa', salpimenta y sofríe 20 minutos a fuego medio.
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8.
Calienta el resto del aceite en una sartén y dora las albóndigas.
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9.
Escúrrelas sobre papel absorbente y añádelas a la cazuela del tomate.
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10.
Cocina 10 minutos a fuego medio y reserva.
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11.
Hidrata el cuscús según las instrucciones del fabricante.
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12.
Sirve las albóndigas en salsas con el cuscús y espolvorea con eneldo picado.
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