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Fácil
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¡HOLA! COCINA
El mejillón es uno de los moluscos más saludables y nos proporciona un intenso sabor a mar. Es un ingrediente económico cuyas preparaciones más populares son al vapor, a la vinagreta o los típicos "tigres", es decir rellenos de bechamel, rebozados y fritos pero, sus posibilidades culinarias no se quedan ahí. Puede servirnos para hacer un caldo que usaremos como fondo de un arroz, o incluso para preparar una sopa como esta que te proponemos, en la que los aromatizaremos al azafrán.
- 800 g de Mejillones
- 1 ud de Cebolletas
- 1 cs de Harina
- 200 ml de Nata para cocinar
- 100 ml de Vino blanco
- 1 cs de Perejil fresco picado
- Azafrán
- Sal
- Pimienta blanca
- 4 ud de Langostinos cocidos
-
1.
Limpiamos los mejillones bajo el grifo quitándoles las 'barbas' y cualquier resto que tenga adherido a la concha.
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2.
Los introducimos en una cazuela y los abrimos al fuego con un buen chorro de vino blanco. Puedes añadirle, si quieres, unos granos de pimienta negra que le darán un toque diferente.
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3.
Cuando se hayan abierto, los retiramos del fuego y dejamos templar. Una vez templados, eliminamos las conchas y colamos el caldo obtenido.
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4.
Pelamos la cebolleta y la cortamos en juliana. La rehogamos en una sartén con el aceite durante unos 4 minutos.
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5.
Seguidamente añadimos la harina y la sofreímos 1 minuto removiendo sin parar para que no se nos queme. Agregamos el caldo de los mejillones.
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6.
Cocemos 5 minutos a fuego bajo y agregamos la nata y el azafrán, salpimentamos y mezclamos bien.
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7.
Incorporamos los mejillones. Cocinamos un par de minutos, no hay que pasarse porque los mejillones ya los hemos cocinado antes.
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8.
Servimos en platos hondos o cuencos y decoramos con un langostino en cada plato, espolvoreamos el perejil y servimos.
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