Planes 'gastro': cuatro restaurantes para disfrutar de la (verdadera) cocina italiana
Pizza, pasta a la carbonara, 'limoncello'... Si hiciéramos una encuesta popular sobre los productos, recetas y bebidas más característicos de la gastronomía italiana seguramente estos tres serían algunos de los más mencionados. Sin embargo, hay mucha vida más allá de estos clichés. Hoy hacemos parada en cuatro restaurantes españoles especializados en cocina ‘Made in Italy’ que así lo demuestran
Con una base típicamente mediterránea, al igual que sucede con la española, la gastronomía italiana es una de las cocinas más populares del mundo, sobre todo gracias a uno de sus emblemas más reconocibles, la pizza. Sin olvidar, por supuesto, recetas a base de pasta acompañadas por las omnipresentes salsas boloñesa o carbonara (que ni siquiera se preparan de forma correcta en muchos de los restaurantes supuestamente italianos). Hoy nos alejamos de esos clichés para hacer parada en cuatro locales con verdadero sabor a Italia: establecimientos en cuya carta no encontraremos las clásicas pizzas, pero sí platos que tal vez no han alcanzado la misma fama, aunque no por falta de ‘méritos gastronómicos’.
En Barcelona, el pequeño tamaño del restaurante Xemei es indirectamente proporcional a la fama de la que goza. De hecho, para muchos es hoy por hoy el mejor restaurante italiano de la Ciudad Condal. Y no sirve pizza. Stephano y Max –hermanos gemelos- son los dueños y señores de 'Xemei', donde encontramos auténtica cocina veneciana y más de cien referencias de vinos, sobre todo italianos y españoles. Pescado fresco, carne de primera calidad, pastas frescas o una ‘burrata’ de increíble sabor y textura forman una carta sencilla basada 100% en el producto. Platos como sus memorables ‘spaghetti al nero di sepia’ o, en temporada, cualquiera que lleve la característica trufa blanca de Alba son de lo mejor que sale de la cocina de 'Xemei', amén de sus postres caseros donde no resulta complicado encontrar el clásico tiramisú. Sus carismáticos dueños acogen a todo tipo de clientela en pleno barrio de Poble Sec (considerado últimamente como la milla gastronómica de Barcelona) y entre sus comensales se dan cita desde anónimas parejas de enamorados hasta la cantante Patti Smith o el actor Sean Penn. Un lugar situado a caballo entre lo moderno y lo tradicional, lo ‘cool’ y lo clásico donde pueden presumir de elaborar buena cocina italiana, de la de verdad, sin necesidad de masas ni hornos de leña.
A tan solo 30 minutos de vuelo de Barcelona, aterrizamos directamente en Palma para saborear los platos de Ottimo, uno de los mejores restaurantes italianos de Mallorca. Su cuidada selección de ‘antipasti’ incluye la tradicional ‘parmiggiana’, el ‘carpaccio de buey’ o un delicioso pulpo servido con patatas y una pasta de aceitunas negras. En 'Ottimo' hacen especial hincapié en la cocina mediterránea, de ahí que los pescados y mariscos frescos ocupen numerosos platos de su carta. La ‘corvina servida con gamba blanca y puré de patata’ o el ‘atún rojo con berenjena’ son dos de los platos más representativos de este local, que también trabaja la pasta con verdadero esmero dando vida a platos como los ‘linguine con pesto’, los ‘tagliatelle con gambas’ o el ‘risotto con bacalao y tomatitos’, matizados bajo la batuta gastronómica de Adriano Cesaretto en pleno corazón de la capital balear.
En Madrid, y más concretamente en Mercato Ballaró encontramos una apuesta italiana por partida doble que sirve en su piso inferior una propuesta más casual (basada en platillos y vino de calidad servido por copas), para reservar la parte superior a una experiencia más trabajada basada en la gastronomía propia de la cocina del sur de Italia. Aquí, en la parte superior, sirven un menú degustación (32,50€, bebidas no incluidas) donde se ofrece la posibilidad de probar lo más característico de su cocina. En la carta, platos como el ‘carpaccio de corvina con trufa de verano’, los ‘chipirones rellenos a la manera de Lipari’ o los ‘linguine carbonara de trigueros, papada de cerdo negro y crema de trufa negra’ son algunos de los más populares.
En la parte de abajo, más tipo taberna, tampoco encontraremos ningún atisbo de pizza, aunque sí platos como los ‘rollitos de berenjena y calabacín rellenos de queso ahumado con mozzarella’, una tradicional ‘ensalada de rúcula, tomatitos y parmesano’ o un auténtico homenaje a la cultura italoamericana gracias a su ‘frito siciliano', que incluye dos tortitas de garbanzos, dos croquetas de patata y menta y dos bolitas de arroz rellenas.
Sin movernos de Madrid, la Trattoria Manzoni continúa con su firme apuesta por acercar al público desde lo más popular hasta lo más recóndito y desconocido de la gastronomía italiana. Por eso, aunque aquí sí encontraremos pizzas en su carta, también encontraremos recetas e ingredientes menos conocidos de la gastronomía italiana en forma de platos monográficos de temporada, que en su última apuesta giran en torno a la porchetta: el fiambre típico del ‘street food’ en Italia. Elaborada a base de cerdo deshuesado, especiado con sal, pimienta, ajo, romero y tomillo, la porchetta se suele cortar muy fina y es frecuente encontrarla entre bocadillos y piadinas en los puestos callejeros de Roma y la Toscana. En 'Manzoni' la encontrarmos en platos como el ‘carpaccio de porchetta’, hecho con salsa de verduras, huesos de cerdo y jamón, o el ‘risotto de porchetta’, un plato muy sápido ya que lleva un potente fondo de carne, queso pecorino y el toque aromático de la chalota braseada.
Además, junto con esta apuesta de ‘micro jornadas gastronómicas’ dedicadas a un producto concreto, el local ofrece, como sugerencias de maridaje, varietales de uvas italianas poco conocidas en nuestro país y vinos biodinámicos de pequeños productores traídos de Italia en rigurosa exclusiva.
